La edad de los profesores de universidad supera la media nacional

La plantilla de la universidad envejece. Los rectores ya han lanzado en varias ocasiones la señal de alerta porque cada año que pasa el problema se agrava y hay que poner un remedio ya. En el caso concreto de Castilla y León, la media del personal docente e investigador (PDI), que incluye al personal funcionario y laboral, de los centros universitarios es más alta que la estatal - 49 y 48 años respectivamente-, pero aún es mayor si únicamente se tiene en cuenta a los profesores fijos, con un promedio de 54 años. En las universidades públicas de la región llega a los 50, mientras que en las privadas los docentes son cinco años más jóvenes. Lo que es más preocupante es que la plantilla joven -la menor de 35 años- merma en cada curso.

En Castilla y León representa tan sólo un 7,7 por ciento y a nivel nacional un 8,5, mientras que no hay ningún profesor funcionario en la Comunidad que se encuentre en esa franja de edad.

Tasa de reposición

Al mismo tiempo crece a pasos agigantados el número de profesores que se aproxima a la jubilación -entre 60 y 66 años-. En los centros universitarios autonómicos alcanza ya al 12,4 por ciento del colectivo. Así lo refleja el último informe publicado por el Ministerio de Educación referente a los datos del curso 2014-2015, que además recoge que los profesores e investigadores que superan los 67 son el 2,4 por ciento en la región.

La edad de la plantilla es un asunto que inquieta ya, y mucho, a los máximos responsables de las universidades públicas. Los docentes envejecen y si no se busca una solución inmediata, el problema no hará otra cosa que crecer. Es por ello que, también en numerosas ocasiones, los rectores e incluso el consejero de Educación, Fernando Rey, han llamado a poner en marcha cuanto antes un relevo generacional.

No pocas veces han pedido al Gobierno central que elimine la tasa de reposición que encorseta la oferta pública de empleo para poder cubrir las necesidades reales de profesorado y dar oportunidades de acceder a los más jóvenes, que son, en definitiva, los que pueden garantizar el futuro de estas instituciones.

Y es que hay determinadas titulaciones en las que esta situación está ya cerca de ser grave, como es el caso del personal funcionario en las facultades de Medicina o Derecho de Valladolid, donde el profesorado fijo ronda los 60 años.

En el caso de los catedráticos, la edad media en la Comunidad es de 59 años y en el de los profesores titulares de universidad de 52. Si se pone el foco únicamente en las cuatro instituciones públicas de la Comunidad -Burgos, León, Salamanca y Valladolid-, la que cuenta con un PDI de edad más avanzada es Salamanca, con una media de 51, mientras que es Burgos, la más joven de todas, la que tiene docentes de menor edad, con un promedio de 48 años y el 8 por ciento de la plantilla menor de 35. En el caso de la Universidad de Valladolid, la media de edad de los docentes es de 50 años y en León, de 49.

Únicamente 136 personas que forman parte del PDI de las universidades de Castilla y León son menores de 30 años, mientras que en la franja de edad donde más personal se concentra es en la de 40 a 59 años, con alrededor de 5.000 trabajadores.

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