Mas reconoce que una derrota soberanista hundirá el proceso

Planteadas las elecciones catalanas de septiembre como un todo o nada para el soberanismo, el presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha solicitado esta mañana a los votantes independentistas un apoyo masivo a las tesis rupturistas, asumiendo de manera implícita que una derrota de la lista unitaria, o incluso una victoria con resultado ajustado, dejaría el proceso muy tocado.

En este contexto, y con posterioridad al Consejo Nacional de CDC que ha ratificado la lista unitaria junto a ERC y las entidades soberanistas, Mas ha reclamado para su candidatura, en la que va de número cuatro, el apoyo de quienes votaron por la independencia en la pseudo consulta del 9 de noviembre del pasado año. De otro modo, ha advertido, no subir al «tren de la independencia» sería dejar Cataluña en una «vía muerta» y propiciar que el Estado «pase por encima sin misericordia».

El objetivo de CDC y ERC, iniciar un proceso que conduzca a la secesión en un plazo que ahora ya se plantea por debajo de los diez meses.

Mas ha aludido al difícil parto de la lista de confluencia, cuyo programa será presentado mañana oficialmente, para la que CDC y ERC han tenido que «salir de la comodidad de las siglas» para unirse con un mismo objetivo. Mas ha reconocido que un proceso así todavía es más complicado cuando se trata de dos fuerzas de ideología diferente.

De modo genérico, el presidente catalán ha reconocido que «hay incertidumbres, interrogantes -en el proceso soberanista-, los puedo entender», y advirtiendo a los indecisos, ha señalado: «Que se lo piensen dos veces».

Se trata, ha concluido el presidente catalán en alusión al paso dado por CDC y ERC, de asumir cada cual su «cuota de responsabilidad» para mantener la «llama encendida de la unidad», que es «la que nos puede llevar a la victoria».