Así ve Mariano Rajoy el retroceso electoral del 24-M: su «plan» para remontar, en diez claves

1-. Mariano Rajoy dibuja el 24-M para su partido con esta escenografía, aliñada con cierto toque de autocrítica: la causa principal de la pérdida de votos del PP «por el centro y la abstención» ha sido haber «pedido muchos esfuerzos a los españoles». «Es cierto que no había otro remedio que hacerlo, pero el remedio ha sido duro», infiere.

2-. Se lamenta así por el reparto de los votos dentro del actual sistema electoral: «El PP ha ganado en ocho de las diez principales capitales españoles y solo gobierna en dos». Y el dardo de Rajoy a la «competencia»: «Si Ciudadanos hubiese respetado la lista más votada, el PP gobernaría en todas esas ciudades».

3-. «Hemos cumplido con nuestro deber: evitamos el rescate», ha dicho el jefe del Ejecutivo y presidente del Partido Popular.

Pero la corrupción, el desgaste en el Gobierno, mala comunicación, falta de contundencia... han sido otros de los motivos a los que Rajoy achaca al retroceso electoral sufrido el 24 de mayo y en la constitución de los ayuntamientos del pasado 13 de junio, aunque son las consecuencias devastadoras de las medidas económicas implementadas por su Ejecutivo a las que atribuye el mayor peso de los resultados labrados.

4-. Rajoy se ha congratulado de que, pese a todo, el Partido Popular fue la primera fuerza política el pasado mayo, el que consigue más concejales y acumula más militantes que cualquieras otras siglas del país, también habida cuenta de las últimas encuestas publicadas, que aúpan sus expectativas de mejora.

5-. La piedra crucial del programa con que concurrió el PP a las elecciones generales de noviembre de 2011 fue el retorno de la economía española a la senda de la recuperación. «Hoy podemos decir con satisfacción que hay más personas ocupadas, menos parados y más afiliados a la Seguridad Social que cuando llegamos al Gobierno de la Nación. Pero no es suficiente. Aunque entre 2011 y 2015 un millón de españoles más habrán recuperado sus puestos de trabajo. Si no pudiéramos presentar estos resultados sí tendríamos un gran problema», ha enjuiciado el jefe del Ejecutivo. «Esto era nuestro activo, la marca de una gestión valiente, eficaz y responsable. Es lo que necesitaba España. En lo fundamental hemos acertado».

5-. El mandato de futuro, para lo que resta de legislatura, es seguir rebajando el IRPF y otros impuestos, además de presentar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2016. «Si la recaudación lo permite, no descarto hacer más cosas. Tiempo habrá para detallar esta medida», ha esbozado el dirigente gallego.

6-. Sobre Cataluña y las posibles elecciones del 27-S, «si se convocan, serán comicios solo para elegir el Parlamento autonómico. Si alguien pretende incumplir la ley, el Gobierno le dice a los españoles que velará por su cumplimiento, en particular, si alguien pretende vulnerar la soberanía nacional», ha emplazado contumaz el presidente del PP.

7-. «Tenemos que ganar las elecciones con claridad. Es nuestra obligación, ganar por el margen suficiente para evitar dar marcha atrás en esa tarea», ha mantenido, por lo que ha nombrado a su jefe de gabinete y persona de su máxima confianza, Jorge Moragas, director de campaña.

8-. Toma las riendas: el líder del PP ha anunciado que su implicación mayor en la formación se va a materializar asistiendo a las reuniones del comité de dirección del partido. Y anuncia, a continuación, que se va a volcar personalmente en las actividades del partido, sin menoscabo de su labor como jefe de Moncloa.

9-. No habrá congresos regionales, como demandó Esperanza Aguirre, ha dicho críptico el jefe del PP, al tiempo que pedía autoridad a su partido para convocar una conferencia política los días 11 y 12 de julio, pistoletazo de salida para todas las huestes populares para el curso que queda.

10-. Ante la plana de su partido, no ha desvelado ningún cambio de Gobierno como se demandaba, con movimiento de fichas en los ministerios, pero sí ha presentado un nuevo organigrama estructural del partido, con el joven palentino Pablo Casado como adalid de la Comunicación del partido. Él será vicesecretario de Comunicación, mientras que Moragas dirigirá la campaña para las elecciones generales de fin de año, o principios de 2016. Mantiene a la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, nombra a Fernando Martínez Maíllo (hasta ahora presidente de la Diputación de Zamora) como vicesecretario general de Organización, relega a Carlos Floriano, hasta ahora vicesecretario de Génova, al Grupo Parlamentario Popular y rescata al hasta ahora alcalde de Vitoria, Javier Maroto, como vicesecretario de Sectorial, que es una nueva competencia creada en Génova. Javier Arenas continuará siendo vicesecretario de Autonomías y Ayuntamientos como hasta ahora. Sale del equipo de dirección, Esteban González Pons, cuyo puesto en la Vicesecretaría de Estudios y Programas estará ocupado ahora por la catalana Andrea Levy.

A todos ellos les ha pedido colaboración para que, en lugar de refriegas internas, se vuelquen en la victoria electoral.