Francisco Nicolás, fotografiado junto a Ana Botella
Francisco Nicolás, fotografiado junto a Ana Botella - ABC

«Nicolás no ha vuelto a las clases desde su detención»

La escuela del joven acusado de estafa y falsedad documental asegura que no tenía conocimiento de las actividades de su alumno

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Francisco Nicolás Gómez Iglesias, el joven detenido la semana pasada al que se investiga por presuntos delitos de estafa y falsedad en documento público, aún no ha vuelto a sus clases en el Colegio Universitario de Estudios Financieros (Cunef). [ En imágenes: La vida social del joven que se pasó de listo]

El presunto impostor fue puesto en libertad provisional el pasado pasado viernes, 17 de octubre, después de ser detenido dos días antes. «Nicolás no ha vuelto a las clases desde su detención», han dicho fuentes de la escuela a Servimedia. La escuela asegura que no tenía conocimiento alguno de «las actividades que realizaba Nicolás fuera de Cunef».

Nicolás Gómez, de 20 años, acudía a actos públicos en los que coincidía con personalidades públicas y directivos de empresas.

Incluso asistió a la coronación de Don Felipe como nuevo Rey el pasado mes de junio. El joven, además, aprovechaba esas asistencias para fotografiarse con políticos y altos ejecutivos, documentos que supuestamente después utilizaba junto a otros falsos para convencer a sus víctimas de sus buenos contactos.

El auto de la juez Mercedes Pérez, titular del juzgado de Instrucción número 24 de Madrid donde recayó el caso, menciona que haciéndose pasar por «asesor de la vicepresidencia del Gobierno» consiguió que un empresario le entregara 25.000 euros con «la promesa» de mediar ante el Ejecutivo para la venta de un inmueble de su propiedad situado en Toledo.

Para su labor, Nicolás alquilaba coches de alta gama para acudir a sus entrevistas con posibles víctimas y les colocaba un luminoso azul en algunas ocasiones, similar al que emplean las Fuerzas de Seguridad. Además elaboraba dosieres e informes con apariencia de ser oficiales.

La juez, en el auto por el que deja en libertad sin fianza al detenido, asegura que no se explica que un joven de tan solo 20 años, «con su mera palabrería y aparentemente con su propia identidad», lograra acceder a «las conferencias y actos a los que accedió sin alertar a nadie».

Ahora que Nicolás se encuentra en libertad provisional, Cunef espera que «se solucione lo antes posible este caso», ya que lo que ha ocurrido ha sido un «un hecho aislado y puntual», con el que no se tiene por qué juzgar a la Universidad porque «él era un alumno más» y «no sabíamos, al igual que con el resto de alumnos, a que se dedicaba».

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