El juez impone una fianza de 300.000 euros a Mario Conde para que salga de prisión

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha impuesto una fianza de 300.000 euros para que el exbanquero Mario Conde salga de prisión, en donde se encuentra desde el pasado 13 de abril por repatriar 13 millones de euros del dinero que se apropió y nunca devolvió del caso Banesto. Los investigadores le acusan de idear una compleja trama societaria para ocultar todos sus bienes.

El magistrado considera que se ha reducido el riesgo de que Conde entorpezca la investigación y se fugue, según confirmaron fuentes jurídicas. El juez atribuye a Conde y su círculo más íntimo los delitos de organización criminal, blanqueo de capitales, insolvencia punible y ocho delitos fiscales. Para salir de prisión, Conde tendrá que pagar los 300.000 euros o reunir bienes en garantía que cubran dicho valor, algo que no es sencillo.

Si el exfinanciero abona la fianza y abandona la prisión de Soto del Real, a Conde se le impondrán otras medidas cautelares menos lesivas para impedir que pueda alejarse del foco de la Justicia y torpedear la investigación: el juez ha acordado, en un auto, que Conde comparezca una vez a la semana en el juzgado, se le retire el pasaporte y se le prohíba salir de España, y tenga que aportar un teléfono móvil en el que estar localizado, según fuentes jurídicas.

El juez, que ha tomado esta decisión con la oposición de la Fiscalía Anticorrupción, consideró en un primer momento, tras arrestarle, que Conde debía permanecer encarcelado de forma preventiva para que no entorpeciera la investigación, sobre todo por todo el material incautado en los registros que entonces quedaba por analizar.

Los investigadores de la Guardia Civil sostienen que el exbanquero utilizó los métodos del crimen organizado para ocultar todos sus bienes de la Justicia, que no consiguió recuperar todo el dinero que Conde se apropió en el saqueo de Banesto, y mantener así su alto tren de vida. Según consta en el sumario de la causa, al que accedió ABC, Conde disfrutaba de un yate, de un club de gol y contaba con diversas viviendas, entre ellas una finca de lujo en Palma de Mallorca.

La compleja trama societaria que ideó Conde, en la que tuvo un rol relevante su hija Alejandra y su abogado Francisco de la Vega, contaba con sociedades en Suiza, Reino Unido, Países Bajos, Luxemburgo, Emiratos Árabes Unidos, Islas Vírgenes y Curaçao.