España intenta evitar que Dijsselbloem controle los tiempos en la carrera del Eurogrupo

España pretende que el proceso de elección del presidente del Eurogrupo tenga lugar en un entorno «neutral» y no esté controlado por uno de los dos candidatos, el aspirante a la reelección, Jeroen Dijsselbloem, que ya ha convocado la votación para el día 18. Esa es la tesis que según fuentes bien informadas defiende el ministro de Economía Luis de Guindos en los viajes que está realizando a distintas capitales europeas para promover sus opciones de ocupar el puesto a la cabeza de la zona euro. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, dijo ayer a su llegada a la cumbre Unión Europea-CELAC de Bruselas que España está legitimada y «tiene derecho» al puesto, teniendo en cuenta el esfuerzo y la buena gestión realzada para salir de la crisis.

Según Rajoy, De Guindos «es un candidato muy bueno» y su gestión al frente del Ministerio de Economía «nos legitima para presentar su candidatura a la presidencia del Eurogrupo y la vamos a presentar y la vamos a mantener». Sin embargo, también ha reconocido que hay un proceso detrás de esa decisión y que «será quien tenga que decidir el que lo haga».

Dijsselbloem ya ha incluído la cuestión de la renovación de su mandato en el orden del día de la reunión del Eurogrupo del día 18 en Luxemburgo, adelantando los plazos que permitirían esperar al del mes que viene. Normalmente, a los demás ministros se les pregunta al inicio de la reunión si están de acuerdo con esa propuesta, aunque se trata de una cuestión retórica, porque no se ha dado el caso de que alguien proponga cambiar el orden del día. En este caso, España estaría dispuesta a explicar a los demás países que sería mejor organizar un escenario más «neutral» y que no estuviese controlado por uno de los contendientes –Dijsselbloem- en perjuicio de las posibilidades de su competidor.

Inicialmente, Rajoy había dado a entender además que prefería que este asunto de la renovación o no de Dijsselbloem pasase antes por la mesa del Consejo Europeo, donde tiene más opciones para hacer valer una visión de conjunto de las instituciones en la que queda de manifiesto que España está infrarrepresentada esta legislatura. De hecho hay una cumbre la semana siguiente a la del Eurogrupo, en la que está previsto que los jefes de Estado y de Gobierno discutan sobre el futuro de la zona euro y de sus instituciones, por lo que fuentes españolas consideran «razonable» que no se tome una decisión sobre el próximo mandato de dos años y medio al frente del Eurogrupo, antes de saber qué piensan los líderes nacionales. De Guindos estuvo ayer en Finlandia y en Alemania tratando de recabar apoyos a su candidatura y el viernes visitará Estonia. Alemania es el principal apoyo del español y Merkel lo ha resaltado en distintas ocasiones. En un principio, Jeroen Dijsselbloem, cuenta ya con el apoyo de Francia (hecho ya explícito ayer) y de Italia, dos de los cuatro países grandes gobernados por partidos socialistas, y espera que se sumen además de su propio país, Bélgica y Luxemburgo y varios de los pequeños.