La otra cara de la recuperación: más atascos, seguros más caros, más emisiones de CO2...

Subida de las primas de los seguros

La recuperación económica ha supuesto un aumento del consumo de las familias como demuestra que las ventas del comercio minorista subieran un 6,5% en tasa anual en diciembre. Lo que lógicamente suele ir acompañado de un incremento en la contratación de seguros para productos como los vehículos que, en enero, incrementaron sus ventas un 27,5%, el mayor crecimiento desde hace 20 años impulsado, según datos de las asociaciones de fabricantes (Anfac), concesionarios (Fanconauto) y vendedores (Ganvam). En esta línea, la patronal de las aseguradoras (Unespa) apuntaba hace algunos días a un repunte de las primas de los seguros, que podrían repuntar en 2015 por encima del 2% tras ingresar el año pasado 55.343 millones de euros por las ventas de las pólizas el año pasado, un 0,84% menos que en 2013.

En opinión de la presidenta de la patronal de las aseguradoras, Pilar González de Frutos, para 2015 lo que necesita el sector es «un ejercicio estable, razonable en su crecimiento y sostenido, ya que es un año importante para las empresas aseguradoras» por las inversiones «fortísimas» a realizar su adaptación a la nueva normativa Solvencia II. Así que posiblemente su seguro se encareza durante los próximos 12 meses.

Más atascos y accidentes

El aumento de la actividad económica y del empleo se ha traducido de manera, casi automática, en el incremento del tráfico y de los accidentes. En 2014, se produjeron 1,7 millones de accidentes levesde tráfico en las ciudades españolas. Se trata del primer incremento que presencian estos siniestros desde 2007. Así lo demuestran los datos recogidos por Tecnologías de la Información y Redes para las Entidades Aseguradoras (Tirea). Esta cifra supone un aumento del 0,32% respecto de 2013. No obstante, España salvó el año pasado, por muy poco, el descenso en la siniestralidad vial sostenido durante la última década.

El año 2014 se cerró con un total de 1.131 fallecidos en 981 accidentes vías interurbanas, apenas tres personas muertas por debajo de los registrados el ejercicio anterior. A esto hay que añadirle unas cifras récord de venta de vehículos en 2014, que se cerró con un incremento de las ventas del 18% , y parece que en este 2015 va a seguir con la misma tendencia. En enero el mercado español de turismos y todoterrenos creció un 27,5% con respecto a enero del año anterior y registró un volúmen total de 68.118 matriculaciones. Al respecto las asociaciones del sector como Anfac, Ganvam y Faconauto, informaron que se trataba del mejor dato de un mes de enero desde 2010.

Otra de las consecuencias de este incremento del tráfico y de los sinistros será, según apunta ya el sector asegurador, un incremento de las primas que se pagan por los seguros de automóviles y que durante la crisis han estado congeladas e incluso han bajado en muchos casos.

Más divorcios

La crisis tiene un doble efecto en los divorcios y separaciones conyugales. Por un lado las mayores dificultades económicas provocan desaveniencias entre los cónyuges y, por tanto, incentivan los divorcios pero, por otro, la pérdida de empleo y los menores recursos también hacen más difícil la separación. Para una pareja vivir juntos y compartir gastos es más barato que hacerlo por separado. De este modo, los primeros años de crisis se tradujeron en un descenso del número de disoluciones matrimoniales. De las cerca de 146.000 de 2006, se pasó a poco más de 106.000 en 2009. A partir de ese momento, entre 2010 y 2013 las separaciones, divorcios y nulidades se mueven en el entorno de las 110.000, pero en 2014, el repunte de la actividad económica ha venido acompañado también de un incremento de las disoluciones matrimoniales.Según datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), las demandas de disolución matrimonial y de divorcio aumentaron un 12,2% y un 12,5%, respectivamente, en el tercer trimestre de 2014, último periodo del que hay datos.

El catedrático emérito de Sociología Juan Díez Nicolás apunta que "la crisis es una de las razones principales". "Las dificultades económicas traen muchas veces peleas, discusiones y malestar en casa. En todas las crisis suelen aumentar los divorcios, igual que los crímenes, porque la sociedad está desorganizada", explica. "No obstante, es cierto también que, al principio de la crisis, parejas que querían divorciarse aguantaron un tiempo juntas por los problemas económicos, pero solo al principio. El ser humano se acostumbra a todo, incluso a vivir en crisis, y llega un momento en el que esa situación de no querer estar juntos ya no se puede aguantar, a pesar de que siga habiendo dificultades", añade Díez Nicolás.

Más deuda

La recuperación de la economía y el saneamiento del sistema financiero se está empezando a traducir, aunque lentamente, en un aumento del crédito. Las empresas necesitan financiación para abordar inversiones y también los consumidoresbuscan créditos para comprar casas o bienes de consumo duradero, y eso es positivo. Sin embargo, las empresas y los hogares españoles todavía están muy endeudados. La deuda acumulada por las familias se acerca a los 750.000 millones de euros a pesar de que durante la crisis los hogares han ido poco a poco pagando sus créditos. A pesar de todo lo anterior, en su último Informe de Coyuntura, el Instituto de Estudios Económicos, prevé un crecimiento del 2,6% en el consumo de los hogares causado por el «aumento de la capacidad adquisitiva resultante de la reducción del precio de los productos energéticos».

El agujero de las empresas es casi de un billón de euros a pesar de los avances de estos últimos años. La vuelta al crecimiento y los bajos tipos de interés pueden acabar con esta tendencia descendente de la deuda. No obstante, los analistas apuntan que más de uno, incluidos los bancos, habrá aprendido la lección de la crisis y que tanto ciudadanos como entidades financieras serán más cautos a la hora de pedir y dar créditos. Sin embargo, según el Banco de España, la financiación total a sociedades no financieras residentes en España cayó en 2014 un 3,4%, hasta 959.358 millones de euros.

Doble proceso

Para el coordinador del Informe Fundación BBVA - Ivie 2014, Francisco Pérez García, lo que está ocurriendo son «2 procesos simultáneos: Por una parte, las empresas que se ven demasiado endeudadas siguen desapalancándose, mientras que ahora está aumentando el crédito para nuevos proyectos». En esta línea, rechaza que se esté produciendo un encarecimiento de los créditos aunque sí que las entidades se están volviendo más «selectivas» por la incidencia de la morosidad, entre otros factores. García ha recordado que los tipos de interés están muy bajos.

Más emisiones de gases contaminantes y daños a la biodiversidad

El incremento de la actividad económica podría tener consecuencias negativas sobre el medio ambiente, en forma de incremento de las emisiones de gas invernadero o en el deterioro de nuestra biodiversidad. Según el I nforme Fundación BBVA- Ivie 2014, las emisiones de gases de efecto invernadero crecieron de forma relevante entre 1990 y 2007 - un 54%- mientras en la UE-15 se reducían un 2,2%. Es decir, en los años - con la excepción de 1993-1994- en que la economía española registró fuertes crecimientos.

Entre las grandes economías sólo Italia se asemeja a nosotros, aunque sus emisiones sólo crecieron un 8%. Con la crisis, en 2012, parece que la tendencia es a la baja en términos generales a aunque seguimos superando en un 22% las de 1990, según este mismo Informe . Ahora que regresa el crecimiento podría producirse un repunte en este terreno, aunque en base a los datos más recientes correspondientes a 2013 el descenso de emisiones registrado en 2013 se cifró en 26 millones y medio de toneladas de CO2-equivalente, un 7,7% global respecto a 2012. Atribuible principalmente al sector energético, responsable de un 74% de la caída interanual.

«Composición del crecimiento»

En opinión de Francisco Pérez García, director del citado estudio, todo ello dependerá de «la composición del crecimiento, ya que si fuera un crecimiento basado en actividades muy intensivas el riesgo medioambiental sería mayor que en el caso de un crecimiento con otra composición, basado en la economía del conocimiento».

Vuelve el déficit exterior

El PIB español creció un 0,7% en el último trimestre del año pasado, un 1,4% en todo 2014. Para los próximos 12 meses y 2016, el servicio de estudios de BBVA prevé una subida del 2,7% tal y como han publicado esta semana. Sin embargo, hay una magnitud que se ha deteriorado en paralelo: el déficit vuelve a la balanza por cuenta corriente después de un breve paréntesis en 2013. En concreto, según el Banco de España, acumuló entre enero y noviembre de 2014 un déficit de 3.600 millones de euros frente al superávit de 12.300 millones en el mismo periodo del año anterior. Algo que se atribuye al déficit de 28.300 millones de la balanza de rentas, frente al superávit de 24.700 millones de la balanza de bienes y servicios. Además, el mayor crecimiento se traduce en más compras al exterior y, por tanto más déficit comercial.

Para el catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Alcalá y autor del reciente «Exportaciones de españolas de servicios: evolución, retos y perspectivas», Juan Ramón Cuadrado, este saldo negativo en la balanza de pagos «no es grave, ya que en los últimos meses del año, ha habido un incremento de las importaciones». (meter datos)

Cuadrado ha recordado que, al contrario que en otras ocasiones, «las exportaciones se mantienen» por lo que España no pierde cuota de mercado. «No hay que preocuparse en exceso, las empresas que empezaron a exportar continúan haciéndolo», ha añadido. En esta línea, ha puesto en valor el rol de las exportaciones de servicios (empresas de diseño, consultoría,...) que suponen alrededor del 70% de la economía española en términos de ocupación y contribución al PIB.