Dustin Brown es uno de esos tenistas con un amplio sentido del espectáculo. Conocido por sus rastas y su vestimenta, el alemán, que el pasado curso eliminó a Rafael Nadal en Wimbledon contra todo pronóstico, ha protagonizado una de las jugadas del año , y eso que aún estamos en enero.
En el Challenger de Bergamo, en Italia, Brown puso en pie a la grada con una volea genial . Después de un poderoso primer saque, el alemán subió a la red y su intento de dejada se quedó demasiado larga. Setkic, su oponente, llegó con tiempo de sobra y lo tenía todo de cara para apuntarse el tanto.
El revés del bosnio, 212 del mundo, fue duro y al cuerpo de Brown. Parecía el punto resuelto, pero el germano se sacó una tremenda volea por la espalda . Un puntazo marca de la casa.
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