A la media hora de comenzar la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, el estadio de Maracaná se ha entregado a Gisele Bündchen . La supermodelo, la mejor pagada del mundo, ha puesto el color con un desfile larguísimo. La grada le ha dedicado una de las ovaciones de la noche.
Bündchen, de 36 años y casada con Tom Brady, ha vuelto a la mayor de las pasarelas después de abandonar en 2015. Lo ha hecho desfilando al ritmo de la «Garota de Ipanema» , la canción que Tom Jobim compuso junto a Vinicius de Moaraes en la terraza del bar Veloso, en el corazón del barrio de Ipanema. Será el último desfile que realizará como modelo.
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