Laporta se interpone entre Bartomeu y la presidencia del Barcelona

El anuncio de Josep María Bartomeu de convocar elecciones al finalizar la presente temporada no es algo que pueda pillar de nuevas a nadie. Desde que Rosell dimitiera y Bartomeu se hiciera cargo de la presidencia del Barcelona han sido numerosas las voces que pedían elecciones basándose en el hecho de que a Bartomeu no le eligió nadie, sino que se encontró con el cargo.

Han bastado unas olas de tamaño mediano para que el dirigente azulgrana no tuviese más remedio que acceder a ellas. Enfrente va a tener a dos pesos pesados, aunque ambos tienen su punto débil. El primero es Joan Laporta que, de presentarse, tiene todas las de ganar. Su laguna negra es la política, que ya le perdió una vez y puede perderle en esta segunda oportunidad.

Laporta tiene una oferta de Mas para ir de la mano en Convergencia y Unión, lo que le alejaría de la presidencia. Presidente del Barcelona entre 2003 y 2010, no pudo presentarse a la reelección vetado por los estatutos. Fue el que fichó a Guardiola, y eso no lo olvida la gente, si bien no logró dejar un heredero lo suficientemente carismático que evitara la subida al poder de Rosell, su gran enemigo. Prepara su regreso a la presidencia, aunque quizás tenga que elegir entre política y deporte.

El segundo es Carles Vilarrubí. Importante empresario catalán, Vilarrubí ha sido responsable de la vicepresidencia institucional del Barcelona desde 2010. Su relación con Rosell se fue desgastando poco a poco pero es un rival temible porque en sus apariciones públicas muestra mucha elegancia, oratoria y saber estar. ¿Su pega? Que su perfil es poco deportivo, aunque sin duda es uno de los candidatos más preparados.

Hay una tercera opción, la de Agustí Benedito, que en las últimas elecciones fue la segunda opción más votada. En este caso, según una encuesta del Mundo Deportivo, el candidato perdería apoyo. Concretamente cuatro puntos. Del 14% que sacó en 2010 ahora rondaría el 10%. El que ganaría según dichas encuestas sería Laporta, con casi un 40% de apoyo frente al 25% que apoyaría a Bartomeu. El resto, una amplia masa social, se muestra indecisa y capaz de ir a un lado o a otro. Toni Freixá y Víctor Font también suenan como posibles candidatos.