Un babuino vocalizando
Un babuino vocalizando - Joel Fagot

Los monos que emiten sonidos similares a las cinco vocales humanas

El estudio tiene implicaciones sobre los orígenes del habla humana

MADRID Actualizado: Guardar
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Hace unas semanas, investigadores de la Universidad de Princeton daban a conocer un estudio que decía que no hay nada en la anatomía vocal de los macacos que les impida producir un habla humana «claramente inteligible», pero, y ahí está el problema, carecen de los circuitos cerebrales para hacerlo. Ahora, una nueva investigación apunta en el mismo sentido y señala que los gruñidos, gritos y llamadas amorosas de los babuinos contienen cinco sonidos muy similares a las vocales humanas. El estudio, llevado a cabo por un equipo de la Universidad de Grenoble en Francia, aparece publicado en la revista PLoS ONE.

Una idea prevaleciente sobre el origen de la palabra es que se requiere la laringe humana baja para ser capaz de producir conjuntos de vocales distintas, y que la alta laringe de los primates no humanos les impide producir las vocales que se encuentran en todos los idiomas humanos.

Por lo tanto, los científicos creen que el lenguaje se originó hace relativamente poco tiempo, en los últimos 70.000 a 100.000 años, y poca investigación sobre los vínculos entre la vocalización de los primates no humanos y el habla humana se ha llevado a cabo.

Para investigar ese tipo de paralelismos, el grupo de Grenoble analizó 1.335 vocalizaciones espontáneas producidas por 15 babuinos de Guinea machos y hembras en diferentes contextos sociales, y estudiaron la anatomía del tracto vocal a partir de dos ejemplares que murieron de causas naturales.

Movimientos de la lengua

Los investigadores encontraron que los babuinos producen cinco sonidos que tienen similitudes importantes con las vocales del habla humana. Las personas forman cada sonido vocal con un control preciso de la posición de la lengua en el tracto vocal, y el análisis anatómico ha revelado que la lengua del babuino tiene los mismos músculos que la humana. Esto sugiere que estos monos también utilizan movimientos de la lengua para formar cada uno de los sonidos similares a las vocales. Tomados en conjunto, estos hallazgos sugieren que el lenguaje hablado en las personas puede haber evolucionado mucho antes, a partir de las capacidades de articulación que ya poseía nuestro último ancestro común con los babuinos, hace unos 25 millones de años.

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