La Isla comienza 2012 con las mismas carencias del año pasado

Año nuevo, vida vieja. Al menos para San Fernando. A pesar de llegar el 2012, el municipio no tiene en su horizonte ni un solo proyecto nuevo de envergadura. Al contrario, lo que intentará a lo largo de los próximos 12 meses será desbloquear las actuaciones que continúan paralizadas. Y es que La Isla ha entrado en una especie de bucle de tiempo en el que continuamente se habla de los mismos temas, es más incluso va para atrás en vez de avanzar y para ello hay que echar tan solo un vistazo a los datos, estadísticas y a la situación en la que se encuentran algunas obras o diferentes equipamientos.

Salud

Quizás uno de los temas que más preocupe a los isleños sea el de la salud. ¿Cuánto tiempo se lleva reclamando la puesta en marcha de uso cívico del hospital de San Carlos? Pues bien todavía nada se sabe de este compromiso que deben certificar tanto Defensa como la Junta de Andalucía. Los trabajadores llevan meses protestando para que se les equipare al resto de empleados del Servicio Andaluz de Salud, uno de los primeros pasos para que el deseo sea una realidad, sin conseguir nada por el momento. A todo ello el centro de salud de Camposoto continúa paralizado tras el extenso retraso que sufrió para el comienzo de obra. Un edificio que pretende dar cobertura sanitaria a unos 25.000 isleños y desahogar al resto de centros de la ciudad saturados por la falta de equipamientos.

Educación

En cuanto a educación tampoco hay muchos avances. El reclamado colegio de Camposoto ni siquiera ha comenzado sus obras por lo que es probable que vuelvan a repetirse los problemas de escolarización en la zona. También se ha reclamado un nuevo centro en Ronda del Estero para acoger a los niños de Manuel de Falla y Andalucía, pero la Junta no está por la labor, menos ahora que falta dinero. A todo ello hay que sumar los problemas de mantenimiento de los antiguos colegios de Defensa sin que se defina aún si es responsable el Ayuntamiento o la Junta.

Turismo

Quizás sea una de las facetas más evidentes de las carencias de la ciudad. Si lo que se pretende es realizar un cambio de modelo para sobrevivir del turismo, lo cierto es que se han dado pasos atrás. El más evidente es la pérdida de camas hoteleras ante los problemas que acarrea los apartamentos de Bahía Sur y su pérdida de calificación turística. Además no hay visos de nuevos hoteles y el ejemplo más claro es el de la casa Lazaga.

Por otro lado las obras del tranvía continúan, al igual que se siguen dando fechas de cuándo pasará el vehículo por el centro de calle Real. En cuanto al Bicentenario el Carenero sigue cerrado y al castillo de Sancti Petri apenas se le saca rendimiento. Todo ello a la espera de rehabilitaciones como la del Ayuntamiento o el puente Zuazo.

A todo ello hay que sumar los proyectos interminables como es el caso del parque de la Historia y el MAR o la ciudad náutica que no logran arrancar.