De compras en los bajos del estadio

Salir a comprar el pan por la mañana, pasar por el banco a sacar dinero, acercarse hasta la carnicería para llevarse los ingredientes del almuerzo, ir a por el periódico antes de quedar para tomar un café, y entre paso y paso echar un vistazo a los escaparates. Esa rutina es la que muchas veces echan de menos los vecinos de la barriada de La Liberación, con una escasa oferta de negocios a su alrededor, y que reconocen que «lo de ir de tiendas no es sólo una cuestión de consumir por consumir, sino una oportunidad de tener relaciones». Estos vecinos se quejan de que «para cualquier gestión tenemos que ir al centro, porque aquí no hay manera». Y es que en la zona sur no hay demasiadas opciones para echarse a la calle y disfrutar de las ventajas de un comercio boyante y activo.

No es el principal problema de estos barrios, pero entre las muchas dificultades que arrastra esta parte de la ciudad como el paro, la desintegración urbanística y social, la falta de inserción laboral y la escasez de oportunidades para los mas jóvenes, muchos ciudadanos también mencionan el poco tirón comercial y las malas condiciones de los establecimientos existentes.

Por ese motivo, desde el Ayuntamiento no sólo barajan en estos momentos planes para revitalizar el comercio del centro que ayuden a alcanzar nuevas cotas a los empresarios agrupados en Acoje y Asunico, sino que también utilizan todos los recursos a su alcance para hacer lo propio en los barrios más deprimidos de la ciudad. Y en esta tarea en la zona sur, la principal herramienta, como en tantos otros proyectos, es el Plan Urban.

Esta iniciativa, que una vez haya culminado todas sus acciones habrá cambiado para siempre la fisonomía y el futuro de esta área de Jerez, incluye entre sus objetivos mejorar el comercio de proximidad como motor de reactivación económica y como generador de empleo. En este sentido, uno de los proyectos que más se ha difundido por el momento y que está relacionado con la actividad comercial es la de la construcción del futuro mercado de Federico Mayo, en el que se invertirán 750.000 euros y que ya está en marcha.

Pero la escasa actividad económica de la zona sur, y el descenso del numero de establecimientos invita a apuestas aún mas arriesgadas, que trabajen por integrar ofertas de comercio pero también de ocio; que sustituyan viejos negocios por otros más modernos; que promuevan la capacidad asociativa de los comerciantes de estos barrios y que les den a los negocios la posibilidad de plantar cara a la dura competencia de los centros comerciales y grandes superficies que tienen tan cerca.

Un renovado eje comercial

Todos esos objetivos se visualizan en una de las iniciativas que pretende poner en marcha el llamado Plan Urban en la avenida de Blas Infante, en la que pretende redefinir el eje comercial de manera que las tiendas de esta zona y el futuro Mercado de Abastos de Federico Mayo, que está justo enfrente, formen un complejo más que atractivo para los clientes.

Para ello, la gran actuación que se quiere llevar a cabo es la de construir locales comerciales y un edificio de uso terciario aprovechando los bajos de los graderío norte y sur del Campo de la Juventud, a lo largo de una superficie total de 2.000 metros cuadrados, y en los que se primarán los negocios que den mejores servicios a la población de la zona (comercio de proximidad, entidades bancarias, empresas de servicios, etc.).

La cifra de empresas que podrían aprovechar esta ubicación rondará los 40, y se prevé que cuando estén en marcha puedan crear del orden de un centenar de nuevos empleos.

En total, y desde ahora hasta el año 2012, se invertirán 1,3 millones de euros en esta iniciativa que va de la mano de otra que pretende poner en marcha un programa de incentivos para los propietarios de las tiendas ubicadas en la barriada de La Liberación, una zona comercial que está muy deteriorada, con el objetivo de que al menos una quincena de ellos se realojen en el nuevo equipamiento creado al abrigo del campo donde juega el Jerez Industrial.

En concreto, esta ultima medida persigue ofrecer espacio gratuito a los comerciantes de La Liberación interesados en reubicarse en estos nuevos locales, lo que les permitirá beneficiarse de una mayor afluencia de publico, ya que se espera que todas estas mejoras en el espectro lúdico-comercial de la zona sur sirvan incluso para atraer a clientes de otras áreas de Jerez.

Para animarles a cambiar de ubicación hay un presupuesto de 200.000 euros para los incentivos que se empezarían a conceder en 2011 y se repartirían hasta 2013 en diferentes convocatorias.

Con este paso, lo que pretende el Plan Urban no es sólo darles herramientas a los comerciantes tradicionales de la zona para que se suban al carro de los nuevos tiempos, sino que donde antes estaban instaladas estas vetustas tiendas también se gana un importante espacio público que se puede aprovechar para otros usos.

Tampoco hay que olvidar que otro de los colectivos que podrá beneficiarse de la construcción de estos locales son los nuevos emprendedores formados en la Escuela de Empresas de El Portal, que cuando acaben ese periodo y quieran poner en marcha su propio negocio podrán solicitar hacerlo en este enclave del eje comercial de la avenida de Blas Infante.

Una plaza para la juventud

Junto a estos locales comerciales, en concreto frente a los que se situarán bajo el graderío sur, también se dará un lavado de cara a la plaza de la Juventud, en la que se ubicará la futura sede del Foro de la Juventud tras adecuar el edificio municipal del Estadio. Además, se reordenarán los aparcamientos del campo de fútbol para dejar espacio suficiente para el disfrute de los ciudadanos.