SILENCIOS. El ex alcalde jerezano mantuvo varios significativos en diferentes momentos de la entrevista concedida en exclusiva a LA VOZ. / CRISTÓBAL
PEDRO PACHECO SECRETARIO GENERAL DEL PSA

«La gente me pide que vuelva y les digo que por Navidad, como el turrón»

«Yo en el Ayuntamiento de Jerez no tuve jefas; coincidí con dos señoras con una cosa en común, que es que no tienen idea ni del Consistorio ni de la ciudad»

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La cita es en el Hotel Tryp de Jerez a las cinco en punto de la tarde, como diría el poeta al que le buscan los restos. No es que haya encontrado a un desaparecido, pero sí intentaré encontrar, de nuevo, al político de verbo explosivo, ése que nos gusta a los periodistas, el que da titulares. Hoy quiere hablar, ya me lo pareció el día que nos reunimos en su pequeño despacho de Cajasol.

Le veo pletórico y receptivo; sonríe a menudo. Le pregunto cómo está. Y su respuesta es contundente: «Enorme». ¿Pero sigue igual que cuando lo decía? «Sí. ¿Por qué no? Yo me encuentro muy bien, tranquilo y observando con estupefacción lo que sucede en Andalucía, España y Jerez». Y empezamos la entrevista.

-¿Va a volver a la política?

-Yo no me he ido. Yo este año he dado un paso al lado. Pero no me he ido.

-Pero no está en la política activa, en la primera línea.

-No olvide que yo empecé en el año 72, y he estado en primera línea hasta hace un año. Hice un parón, me puse al lado de Por tanto, no me he ido. Entonces a su pregunta le contesto que hay pintadas que dicen «Pacheco vuelve, vuelve ya», y yo les digo jocosamente (ríe a placer) que por Navidad, como el turrón El Almendro.

-Pero usted sabe por dónde voy.

-Y yo le contesto que no me he ido.

-¿Tiene pensado presentarse a las próximas elecciones municipales o autonómicas?

-No, no, no Ahora estoy preparando el próximo congreso del PSA, que será a finales de noviembre en Chiclana. Es un partido que ha sufrido en exceso un duro castigo en las pasadas elecciones municipales y autonómicas, que se está recomponiendo poco a poco, y mi tarea política ahora es tener un gran congreso, que curiosamente es en la provincia de Cádiz.

-Algunos le daban por muerto políticamente.

-La gente habla mucho, igual que dicen ahora que están arrepentidos de no haberme votado. Tienen amnesia.

-¿Qué van a llevar al Congreso del PSA?

-Ahí vamos a decidir las líneas de actuación de los próximos años y el tema candente es si hay espacio político para el andalucismo y qué tipo de andalucismo hace falta. El Congreso dará su opinión sobre esto y éste es mi principal objetivo ahora, y luego veremos cómo transcurre todo porque el 2009 va a ser muy, muy duro. El doble de duro que éste.

-¿Esto le pude beneficiar? La crisis puede desgastar al Gobierno así como a la oposición si ésta no ejerce de forma constructiva.

-Si surgiera una fuerza política que encauzara tanto malestar como hay actualmente, eso sería preocupante. No sé si recuerda usted a El cojo manteca, cómo encarriló una gran dosis de protesta social. Pero a los políticos no nos interesa sacar rédito, frutos políticos de esos discursos. Pero puede suceder, no olvide que estamos soportando una situación social durísima y puede haber algo o alguien que pueda encarar y darle vestido a tanto malestar. Si bien le digo que a nosotros no nos gustaría ser ese partido.

-¿Qué propuestas tiene su partido?

-Mire, hay un espacio político andaluz por desarrollar y por ahí van a ir nuestros movimientos. ¿Cuáles son? Una gran fuerza andalucista que por supuesto no tiene que ser la suma de las siglas que tiene actualmente. Tiene que ser algo distinto.

-¿Pero cómo de distinto?

-Será una gran coalición, un gran bloque. El nombre no lo tenemos todavía, pero repito que ya no es suficiente la suma de las distintas siglas andalucistas que hay en la Comunidad para atraer a tantos electores que están huérfanos

-¿Quiénes podrían entrar a formar parte de ese todavía llamado bloque?

-Gentes de IU, otras pequeñas siglas andalucistas como Convergencia Andaluza, un sector importante del PA y otros Independientes Fíjese la cantidad de ayuntamientos que están gobernados por independientes. Si coincidimos en esa idea de que hay espacio político propio, se puede hacer una gran formación. Estamos hablando continuamente con todos, lo que pasa es que no transciende a los medios.

-¿Para las municipales?

-Hay que trabajar duro, esto no es tan fácil. Puede cuajar en municipales, pero incluso sería pronto.

-¿Pero cambiará de nombre, no será como PSA?

-No, no. Quiero decir que en la búsqueda de ese espacio político que existe, que es el nacionalismo andaluz, no basta sólo con aunar las siglas andalucistas. Tiene que ser algo nuevo. Este partido, el PSA, que es el que a mi me atañe, debe hacer un esfuerzo tremendo para que surja algo, como un gran bloque, una coalición donde quepan sin hegemonía ni arrogancia todos los andalucistas huérfanos.

Pacheco se para un momento, coge fuerza y rotundo subraya: «O dicho de otro forma, para derrotar democráticamente al PSOE y al PP no es suficiente lo que tenemos ahora los andalucistas en el panorama político. Insisto, en ese gran bloque aún está sin determinar quiénes entrarían. Aquí caben todos los que quieran y vean que hace falta un proyecto andalucista, porque Chaves y Arenas están agotados.

«¿Oiga! ¿Aquí no dan agua?», pregunta dirigiéndose al recepcionista para pedirle una botella de agua que pagaría a la salida. «Que no esté fría y con dos vasos». Mientras nos llenan las copas le comento que vamos a hablar de Jerez, y con mucha socarronería me responde: «¿Ah! ¿De Jerez también?».

-Usted sabe que en los bares se dicen muchas cosas, una mañana escuchaba a un señor decir que este Gobierno estaba haciendo bueno a Pacheco. ¿Qué dice a esto?

-Y yo les digo que eso lo digan en los votos, porque después dicen las mentiras cuando van a votar (vuelve a reír gusto).

-¿Qué hizo mal para que los jerezanos le dieran la espalda en los últimos comicios?

-Eso es una trayectoria normal, piense que yo gané las primeras elecciones en el 79. Pero además ya se dijo en su momento.

-Pero con la perspectiva que da el tiempo

-Ha pasado un año y pico, todavía es poco tiempo.

-¿En algo más de un año no ha reflexionado? Ahora no haría esto.

-No, no. El partido hizo sus reflexiones y ahí están.

-¿No se arrepiente de nada?

-Yo no. ¿De qué me voy a arrepentir? ¿De haber encauzado la mayor transformación de Jerez en toda su historia? ¿De eso quién se va a arrepentir?

-Me refiero a ese distanciamiento con los ciudadanos cuando fue alcalde. Decían que era arrogante y cuando bajó a los problemas de la calle quizás fue demasiado tarde.

-Que no, que no.

«Pedro. yo recuerdo esas situaciones cuando estaba en Onda Jerez», le comento. «Me ha hecho gracia lo que tú has dicho: cuando estaba en Onda Jerez. Ahora no está en Onda Jerez ¿no? (se ríe). Perdón por la broma».

-¿Ahora quién está?

-No lo sé, no la veo. No sigo la actualidad municipal, la siguen mis compañeros que están en el Ayuntamiento, que lo hacen muy bien.

-¿Cómo ve a Jerez?

-Está como España, en un estado catatónico. Jerez está sin pulso, sin tono muscular. Si yo fuera Darío Fo, le haría a usted un silencio ahora (breve silencio entre los dos). No hay palabras para definir cómo está Jerez. Silencio, repito. Yo creo que serán los ciudadanos los que en próximas confrontaciones electorales rompan ese silencio. No hay palabras para describir lo que es Jerez ahora. Por eso a mi me gustaría ser como ese Nobel italiano, maestro del teatro, y a usted le expresaría yo el silencio (risas). Creo que se ha perdido el liderazgo de ciudad. Dentro del sistema de ciudades andaluzas y españolas, Jerez ejercía un liderazgo aceptado por casi todas. Incluso el Ayuntamiento tampoco ejerce de líder ni en lo social ni en los económico ni en lo político; no se tiene proyectos. Pero sí me llega el acoso continuo a los trabajadores y a los funcionarios, también me llega y estoy comprobando que medio Ayuntamiento no tiene nada que hacer, lastimosamente. En eso coinciden España, Andalucía y Jerez, los tres están claramente en estado catatónico. Hay proyectos que están siendo castigados con lo que cuesta para el contribuyente, como el de la Ciudad del Flamenco, el del Jardín Escénico, el del Museo de la Ciudad de la calle Pizarro, el de la renovación urbana tan bonita de San Juan de Dios, la de Cerrofruto...

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