La Borriquita a su salida de San José
La Borriquita a su salida de San José - A. VÁZQUEZ
Cádiz

Un Domingo de Ramos movido por el viento en la Semana Santa de Cádiz

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CÁDIZ Actualizado: Guardar
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Este Domingo de Ramos tan diferente a otros ha comenzado temprano en Cádiz, antes de lo habitual. El fuerte viento de Levante ha querido acompañar a las hermandades en este día en el que cinco cofradías hacen su estación de penitencia en la Catedral de Cádiz. Ese ha sido el principal inconveniente para las cofradías e incluso a primera hora de la mañana se conocía que Borriquita y Despojado optaban por cambiar sus itinerarios para tratar de contrarrestar ese fuerte viento. Por suerte ha lucido el sol y han sido muchas las personas que se han acercado a los distintos templos para seguir las salidas procesionales.

La Borriquita

La cofradía de la Borriquita ha protagonizado el inicio de la jornada ante la expectación de los fieles que se han concentrado en las inmediaciones de la iglesia de San José, nueva sede canónica de la corporación.

Esa novedad ha sido el principal motivo por el que muchos han querido presenciar una salida histórica desde el templo de extramuros que no se producía desde año 1974. Desde el mediodía ya se palpaban los nervios y la emoción en el ambiente. En el interior de San José los responsables de la hermandad apuran los últimos instantes antes de iniciar la salida procesional. Son momentos de mucha emoción para los vecinos y hermanos de la corporación. Miguel Ángel Gómez es hermano de la Borriquita desde hace muchos años. Para él este es un Domingo de Ramos también distinto. Salió como penitente justo el último año que la hermandad lo hizo desde San José y dijo que volvería a hacerlo cuando regresara. Este 2017 ha cumplido su promesa. Visiblemente emocionado aguarda junto a su mujer a que llegue el momento de cruzar la puerta de San José y para iniciar el recorrido y hacer la estación de penitencia en Catedral.

Ignacio Ortiz, hermano mayor de la cofradía seguía muy de cerca los preparativos. El viento había obligado a modificar el itinerario y la hermandad decidía tomar hacia la calle Poeta Nieto y García de Sola en lugar de seguir por la Avenida como estaba previsto. «Fue una petición de la hermandad del Despojado y nosotros nos hemos plegado a esa solicitud y vamos por donde mismo volvemos», explicaba Ortiz al mediodía. En cuanto al viento, el máximo responsable de la corporación comentaba que «es un factor con el que no siempre contamos pero es tanto o más peligroso que la lluvia. Estamos muy ilusionados porque se ha trabajado mucho y esto es el culmen a estos nueve meses de trabajo tan intenso».

El paso de misterio avanzó lentamente hacia la puerta y una vez que atravesó una primera parte se colocaron las cartelas. Mientras, las secciones de penitentes ya tomaban la calle Poeta Nieto. Con las andas ya preparadas, el capataz Jesús Peña dirigió a los suyos hacia la salida. Sonaron entonces las campanas de San José y la Marcha Real interpretada por la Agrupación Musical Polillas. Se escucharon los aplausos de un público ilusionado por este momento histórico. Como es tradicional, el pregonero de la Semana Santa de Cádiz de este año, Juan Mera indicó la primera levantá y después sonó la marcha Nuestro Padre Jesús de la Paz. Así comenzaba el caminar del paso de misterio. Detrás, salían las secciones de penitentes de la Virgen y el palio avanzaba por el interior del templo hacia la puerta principal de San José. En este caso eran los veteranos hermanos Francisco y Tomás Martín quienes dirigían una maniobra una vez más compleja. Con gran habilidad la cuadrilla logró salvar el dintel del templo de la Avenida y de nuevo sonó la Marcha Real. Posteriormente la banda de música Nuestra Señora de la Soledad de Cantillana interpretaba como no podía ser de otra forma la marcha Paz y Amparo. La espléndida imagen avanzaba adornada con flores blancas y algunas rosas.

El Despojado

El viento de levante condiciona la salida de la cofradía del Despojado que decide hacer el mismo camino de ida que de vuelta hacía la Catedral, con un cortejo que sigue creciendo en juventud y penitentes.

Un Domingo de Ramos en el colegio Salesianos es sin duda una jornada especial en la que la Semana Santa de Cádiz vive uno de sus momentos más intensos por la demostración de como una hermandad se convierte en cofradía el primer día de la semana de pasión.

Casi 300 penitentes, la cofradía del Despojado sigue creciendo a pasos agigantados, aguardan en el interior del pabellón del centro educativo de extramuros. Por delante unas diez horas de recorrido para lograr superar la mayor distancia procesional de Cádiz. Muchas caras de ilusión y sobre todo muy jóvenes esperan sentados cerquita de su Cristo del Amor que contempla en su paso acompañado por el romano y el sayón, todos ellos bajo la autoría de Francisco Romero Zafra.

Todo un colegio volcado con su imagen y con su hermandad recalcando la importancia de la vida anual de las cofradías que nunca debe resumirse en su salida procesional, pues éstas tienen muchas más vivencias a lo largo del año, y en este sentido Jesús Despojado puede dar fe de ello.

Y un año más despojado de sus vestiduras preparado para cargar con una cruz de fe, fervor y pasión. Fuera del pabellón, cientos de gaditanos casi llenan el patio de Salesianos bajo un calor que acompaña al viento de levante que finalmente impedirá al cortejo procesionar cerquita del mar por Amílcar Barca y el Campo del Sur.

La Junta de Gobierno, al igual que la de Borriquita, decide finalmente bajo el amparo del Consejo de Hermandades hacer el mismo camino de ida que de vuelta, tomar por García de Sola y Brunete buscando las Puertas de Tierra, para dejar así una imagen inédita hasta ahora: Jesús del Amor bajo el arco de la muralla en su camino de ida. Asimismo, no es hasta pasadas las tres de la tarde cuando la cofradía echa a andar para dar margen a su predecesora y vecina en el camino, Jesús de la Paz.

Alfonso Cortés, hermano mayor, recuerda los estrenos que salen a la calle: «Los faroles de la Cruz de Guía, las cantoneras de la cruz que lleva el Señor, donadas por un hermano, y una marcha». Ésta última interpretada por la Banda de Cornetas y Tambores 'Santísimo Cristo de la Victoria' que acompaña a Jesús del Amor.

Cortés se emociona minutos antes de colocarse su antifaz blanco reconociendo los «nervios que se sienten en momentos como este. Es todo un año preparando esta salida y solo espero que todo vaya bien y que hagamos una buena Estación de Penitencia».

Cerquita de su hermano mayor, el capataz del Despojado, Joaquín Cortés, aguarda dando las últimas instrucciones a los 120 cargadores que tendrán en sus hombros a Jesús, todos ellos divididos en dos cuadrillas. «Vamos a seguir manteniendo nuestro estilo, hay años que crees que te van a criticar más pero la gente está asumiendo que andamos de otra manera. No pasa absolutamente nada por cargar así, seguimos demostrando que los pasos se pueden llevar a hombro y con largas distancias», explica con claridad Cortés.

Con la primera 'levantá' y la salida del paso por la alta pero estrecha puerta del pabellón de Salesianos se escucha los sones de 'Cristo del Amor', como no podía ser menos. Jesús Despojado sale poco a poco de su colegio, de su casa, repartiendo amor por la calles de Cádiz que un año más contemplan la bella y natural mirada de la imagen de Romero Zafra.

Las Penas

En San Lorenzo este Domingo de Ramos también era distinto. Sin duda alguna el cambio de itinerario, impuesto por no poder acceder por la calle Compañía hasta Catedral, marcaba la salida procesional de Jesús de la Penas y la Virgen de la Caridad. Pese al viento, la corporación decidió mantener su itinerario previsto y poner rumbo a la Seo por el Campo del Sur. Sí atrasó en quince minutos su salida procesional. En el interior de la iglesia de la calle Sagasta formaban las secciones de penitentes del paso de misterio. La hermana mayor de la corporación, Inmaculada Ruiz Gené daba las indicaciones para que se formara el cortejo. Mientras, en el exterior, numeroso público se había dado cita para acompañar a esta cofradía. El paso del Señor avanzó hacia la puerta y se rezó un Padrenuestro. Manuel Ruiz Gené dirigía a los suyos. «Tenéis que hacer fácil lo difícil», les dijo. Y es que en efecto, la maniobra volvía a ser complicada pero la superó sin problemas una cuadrilla experimentada. Sonó la Marcha Real y posteriormente se terminó de preparar el paso ya en la calle Sagasta. Esta vez Jesús de la Penas miraba hacia el Campo del Sur. Tras la primera levantá que ordenó Manuel Ruiz Gené, la banda de la Virgen, la filarmónica de Conil interpretó la primera marcha. Sonó Señor de las Penas para el inicio del recorrido. Ya después detrás del paso se incorporó la banda de cornetas y tambores Santísimo Cristo de los Milagros de Sanlúcar que esperaba en la calle Armengual.

Posteriormente el paso de la Virgen de la Caridad se aproximó hasta la puerta de la iglesia. Iba exornada con flores blancas y llevaba toda su candelería iluminada. En la calle el viento soplaba aún con bastante fuerza y el sol apretaba. De nuevo el capataz Ruiz Gené indicaba a los suyos cómo debían proceder durante la salida. Con cuidado y lentamente el palio de la Caridad asomó por Sagasta. Entonces sonó de nuevo la Marcha Real. Preparados ya los cargadores para poner camino al Campo de Sur, el capataz Ruiz Gené les dedicó unas palabras. «Es un Domingo de Ramos diferente para todos pero llevamos arriba a la de siempre. Tenemos que demostrar que somos de Las Penas de Caridad». Tras una espléndida primera levantá la Filarmónica de Conil interpretó Caridad de tus Penas y el manto rojo se fue perdiendo por una calle Sagasta llena de fieles.

Sagrada Cena

«En plena crisis», como reconoce su hermano mayor, la Santa Cena toma la calle del Domingo de Ramos con pocos estrenos pero con la ilusión de una cofradía que intenta regenerarse.

El claustro del Convento de Santo Domingo tiene poco bullicio. Apenas un centenar de penitentes hablan y esperan comenzar su penitencia por las calles de Cádiz con ganas e ilusión y pueden dar acto de fe bajo el hábito blanco, que tal y como recuerda el director espiritual, Pascual Saturio, «representa como se observa a Dios en el cielo».

La Santa Cena de Jesús mira ya a la puerta de Santo Domingo donde debe esperar que por delante de su dintel pase Jesús Despojado tras el cambio de itinerario de la hermandad salesiana. Una vez pasa justo por delante el paso del Amor, la Cruz de Guía emprende el camino hacía la calle Sopranis, abarrotada de público.

Bullicio y algarabía fuera que no se aprecia minutos antes en el citado claustro de Santo Domingo. Pocos penitentes para una cofradía que «sigue en crisis», tal y como recuerda Benjamín Muñoz, hermano mayor de la Sagrada Cena. «Nuestra cofradía no ha salido de la crisis, mantenemos el mismo número de penitentes pero estoy seguro que saldremos de ella». Eso sí, «en ilusión y ganas estamos repletos. Le pido a todos que se comporten como hermanos de la Cena».

Dos de ellos representan precisamente esa ilusión que se vive por un tiempo mejor en la hermandad. Del mayor al menor. José Luis acumula 18 años consecutivos con su hábito de la Cena. A sus 76 años tiene las mismas ganas del primer día. En el lado opuesto, Javi, con solo dos añitos, vive su segunda procesión tras hacerla a brazos de su madre el pasado año.

Ambos contemplan el canasto del frontal del paso de Jesús del Milagro que reluce nuevo tras ser restaurado por desperfectos ocasionados el pasado Domingo de Ramos de 2016 por la lluvia que cayó en plena calle. Asimismo, la vajilla del paso es otro de los estrenos, gracias a una donación de un grupo de hermanos.

Y con el beneplácito de Jesús de la Salud, ya en su paso de misterio y que espera su momento el próximo Miércoles Santo, y la Virgen de todos los Santos, cuya salida necesitará más tiempo, la Santa Cena sale a la calle tras una complicada maniobra en la que los capataces Eduardo Doeste y Vicente Llorens dan instrucciones casi milimétricas para que el enorme paso de misterio pase sin problemas por la puerta de Santo Domingo.

Humildad y Paciencia

Cumpliéndose los 50 años de la bendición de la Virgen, la hermandad de San Agustín pone el contrapunto a la primera jornada cofrade con un cortejo de estrenos.

San Agustín concentra dos hermandades muy especiales de la Semana Santa gaditana. Cada una diferente de la otra pero singulares por lo que representan. El Viernes Santo será el turno de la Buena Muerte pero el Domingo de Ramos lleva el nombre de Humildad y Amargura.

El patio del abandonado Instituto Rosario sirve de desahogo para que el cortejo se forme en el mismo y mientras la nave central de la iglesia permita contemplar uno junto al otro a Cristo con su madre. El Señor, sobre un manto florar morado que le da un toque sobrio a la vez que nazareno a la bella talla de Jacinto Pimentel y una de las imágenes más notables de la semana mayor de Cádiz. Junto al paso de misterio, el palio de la Amargura que vive el 50 aniversario de su bendición en un 2017 especial que seguramente contará con una salida extraordinaria.

San Agustín espera sin que pueda caber un alfiler a la salida de la procesión que asoma con la Cruz de Guía que porta Julián. Más de 25 años siendo hermano de la Humildad y seis consecutivos iniciando el cortejo. «Un auténtico privilegio», tal y como él mismo reconoce.

Los hermanos penitentes marchan tras él, destacando los veinte escudos agustinos que algunos de ellos llevan en su antifaz por el 400 aniversario de la llegada de los Agustinos a Cádiz. Éste es uno de los estrenos, con la restauración de cuatro faroles de orfebrería, junto con el puñal entregado a la Amargura, réplica de uno perdido en los años noventa.

Y justo antes de que el paso de misterio comience a andar por el interior de la iglesia, David García, hermano mayor, reza y pide por una buena Estación de Penitencia. Será la primera como máximo responsable de la hermandad tras ocho años como mayordomo.

'La Lanzada' y 'Amargura' suenan en San Agustín con la salida del Señor y la Virgen. La banda 'Tres Caídas' de Arcos y 'Nuestro Padre Jesús Nazareno' de Rota acompañan a los titulares de la conocida como cofradía de los vizcaínos. Ambos están ya en la calle poniendo el contrapunto y el colofón al Domingo de Ramos gaditano.

>> Aquí puedes ver el minuto a minuto de la jornada

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