Los 18 palacios más bonitos y menos conocidos de España
Un recorrido por una parte de la historia de España a partir de grandes palacios que merecen ser conocidos
Los palacios surgieron en los primeros albores de la civilización y han sido protagonistas de nuestra historia. Aquel que se alzaba con el poder lo primero que hacía era ordenar la construcción de uno... y cuanto más lujoso mejor. Los que han sobrevivido forman hoy parte de nuestro acervo. Aparte de los más populares, hay muchos otros que, a pesar de estar declarados Monumentos Históricos, no son tan conocidos fuera de sus localidades, aunque en algunos casos son sede de instituciones. Estos son los más antiguos declarados Patrimonio de la Humanidad, Monumento Nacional o Bien de Interes Cultural. Casi todos ellos visitables. Y seguramente no nos vienen a la memoria con tanta facilidad como el Palacio Real de Madrid, el de Aranjuez, el de San Telmo en Sevilla, el Episcopal de Astorga, el del Infantado de Guadalajara, el de Larrinaga en Zaragoza o el de La Magdalena en Santander.
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Palacio de la Aljafería
Zaragoza. Construido en el siglo XI como palacio de recreo de los reyes musulmanes que gobernaban la taifa de Sarakusta. Puede considerarse de los más lujosos entre los palacios árabes, con adornos de clara influencia cordobesa. Su antiguo nombre era Qasr al-Jarariyya (Casa del Regocijo) y fue residencia real, luego del Santo Oficio y más tarde cuartel. Desde 1987 es sede de las Cortes de Aragón. Destaca el Patio de Santa Isabel y el Salón de Mármoles. Su parte mudéjar está incluida desde 2001 en la lista del Patrimonio de la Humanidad.
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Palacio de Sotofermoso
Abadía (Cáceres). Siglo XII-XIII. Fue templario, con lo que eso implica, y perteneció durante cinco siglos a la Casa de Alba. Destaca el patio mudéjar y el jardín renacentista y está bastante deteriorado, lo que no le resta interés. Monumento histórico-artístico. En ABC Viajar contamos ya de forma más detallada su historia: El palacio olvidado de la Casa de Alba: una ruina bella y desconocida en España .
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Palacio de los Sada
Sos del Rey Católico (Zaragoza). Siglo XIII-XVI. Entre sus muros nació -el 10 de marzo de 1452- Fernando el Católico (se conserva su alcoba) y antes de palacio fue castillo. De hecho puede considerarse un palacio fortificado, habitual en la arquitectura militar del siglo XV, con elementos defensivos, como las almenas de la parte superior. Hoy día es el Centro de interpretación Fernando II de Aragón. La iglesia de San Martín (siglo XIII) es la capilla del palacio. Monumento arquitectónico-artístico.
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Palacio del Conde Luna
León. Siglos XIV-XVI. Es parte importante del pasado medieval de la ciudad. Fue Tribunal de la Inquisición y luego quedó casi abandono. Fue almacén y hasta funeraria. Hoy, restaurado, alberga la sede de la Universidad de Seattle y la del Patronato de la Fundación León Real. Destaca la fachada gótico-mudéjar con tres escudos de piedra y un alto torreón renacentista. Es Monumento Histórico Nacional.
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Palacio de Cárdenas
Ocaña (Toledo). Siglo XVI. Junto a la Plaza Mayor y la Fuente Grande. Allí se alojaban los reyes en sus visitas a la ciudad. Destaca la portada gótica y su patio central, rectangular, al que se abren las galerías en los cuatro lados. En la parte mudéjar se conserva un rótulo árabe donde se recuerda que 'No hay más Dios que Alá' (allí sigue). Actualmente es Palacio de Justicia, donde se encuentran los juzgados. Bien de Interés Cultural.
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Palacio de los Momos
Zamora. Siglo XVI. Predomina el estilo gótico isabelino. Estuvo en ruina, fue mesón hasta 1946 y actualmente es el Palacio de Justicia de la ciudad de Zamora. Destaca su fachada de piedra arenisca, que es Monumento Nacional.
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Palacio de los Golfines de Abajo
Cáceres. Siglos XV y XVI. En el casco antiguo. Destaca la casa-fortaleza del XV (con torre con matacanes) y la crestería plateresca del XVI (con animales fantasticos) que recorre la fachada. Es el único edificio de la ciudad con el escudo de los Reyes Católicos, que se alojaron allí. Permite observar como era una vivienda de la nobleza cacereña, las familias descendientes del linaje de Los Golfines. Bien de Interés Cultural.
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Palacio de las Dueñas
Medina del Campo (Valladolid). Siglo XVI. Toma su nombre del antiguo Monasterio de Santa María de las Dueñas. Destaca la portada adintelada y flanqueda de columnas con un gran escudo, el artesonado de casetones y -sobre todo- el gran patio de dos plantas con capiteles, medallones, escudos, balaustradas. Desde 1950 es un instituto de Bachillerato. Monumento Histórico Artístico.
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Palacio de los condes de Grajal
Grajal de Campos (León). Siglo XVI. Destaca la galería renacentista sobre la Plaza Mayor y, en el interior, el patio central con dos pisos de arquerías, así como la escalera renacentista. Lo que fueran mazmorras son ahora un albergue de peregrinos. En 1998 fue adquirido por el Ayuntamiento por un precio simbólico de seis pesetas. Es Monumento Nacional.
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Palacio de Núñez Vela
Ávila. Siglo XVI. Al lado de la muralla, con un bello patio porticado y doble galería de columnas dóricas, balaustrada y escudos en las ventanas. Fue mandado construir, en estilo renacentista, por Blasco Núñez Vela, primer virrey del Perú, hacia 1541, y decapitado en la batalla de Iñaquito, cerca de Quito, en 1546. Hoy es la sede de la Audiencia Provincial. No visitable. Bien de Interés Cultural.
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Palacio de Ayerbe
Ayerbe (Huesca). Finales del XV y siglo XVI. También conocido como Palacio de los Marqueses de Urriés, está situado en la plaza y es un clásico ejemplo del Renacimiento italiano en el que destaca su fachada y el escudo de armas con un enorme sol. Su patio ahora es hoy una calle comunicada con el exterior. Monumento Histórico Artístico.
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Palacio de los Condes de Miranda
Peñaranda de Duero (Burgos). Siglo XVI. Más conocido como de Avellaneda. Situado en la Plaza Mayor, destaca su portada (una de las mejores del plateresco español) con escudo, el patio con doble arquería y la gran escalera. En los salones encontramos artesonados góticos, mudéjares y renacentistas. Está rehabilitado y pertenece al Patrimonio Nacional. Es Monumento Nacional.
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Cuatro propuestas en Madrid
Palacio Bauer. San Bernardo, 44. Siglo XVIII. Se construyó para residencia de los marqueses de Guadalcázar. En el siglo XIX fue adquirido por los banqueros Bauer. Alberga la Escuela Superior de Canto. Monumento Histórico-Artístico.
Palacio de Godoy. También conocido como Palacio de Grimaldi. Plaza de la Marina Española. Siglo XVIII. Fue un encargo de Carlos III a Francisco Sabatini . Hoy es sede del Centro de Estudios Políticos. Destaca su escalera. Monumento Histórico-Artístico.
Palacio de Linares. Plaza de la Cibeles. Siglo XIX. Antiguo Palacio de Murga. Famoso por las leyendas sobre la presencia de los fantamas de los antiguos marqueses. Hoy día es la Casa de América. Destacan la escalera principal con mármoles de Carrara y los techos con pinturas mitológicas. Monumento Historico. El primer sábado de cada mes se organiza una visita nocturna al Palacio para verlo tal como era en el siglo XIX.
Palacio del Marqués de Villena. Cadalso de los Vidrios (Madrid). Siglo XV. Un gran exponente del Renacimiento construido con sillares de granito, de grandes dimensiones. Residencia privada. Solo se pueden visitar los jardines y el estanque, que forman parte de un parque público y que son Bien de Interés Cultural.
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Palacio de Galiana
Toledo. Siglo XI. A orillas del Tajo. sta antigua almunia (palacio de recreo) fue mandada construir por el Rey Al Mamun. Destaca la parte mudéjar, los torreones y su salón central. Monumento histórico artístico. Completamente restaurado, hoy se organizan en sus salones todo tipo de eventos y sirve de escenario a algunas producciones de cine y televisión .
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Palacio de los condes de Benavente
Valladolid. Siglo XVI (1515-1520). Fue residencia de Felipe II y Felipe III (nacieron en él dos de sus hijas). Su esplendor fue en el XVII, cuando fue propiedad del virrey de Nápoles, don Juan Alfonso de Pimentel, conde-duque de Benavente. Después de dos incendios entró en desuso y, posteriormente, acabó siendo asilo para niños expósitos hasta finales el siglo XX. Desde 1990 alberga la Biblioteca de Castilla y León.
