Final de la League of Legends de la Championship Series en el Palacio de Vistalegre de Madrid
Final de la League of Legends de la Championship Series en el Palacio de Vistalegre de Madrid - maya balanya

La fiebre de los «eSports» también arrasa en España

Madrid acoge hasta este domingo la final Split «League of Legends», un evento que refrenda el interés por los deportes electrónicos

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Toda madre con hijos adolescentes habrá pronunciado más de una vez la frase de «hijo, deja la consola y ponte a estudiar». Lo que para muchos es un divertido pasatiempo, para otros se ha convertido en su profesión. Carlos Rodríguez, conocido como «Ocelote», ha sido uno de los mejores jugadores del mundo en algunos de los videojuegos más populares en los llamados deportes electrónicos (eSports), que van camino de convertirse en los deportes del siglo XXI, y vive de ello.

Aunque en el mundillo se podía intuir, este madrileño anunció hace unos meses su retirada de la escena competitiva para centrarse en el desarrollo de su propio equipo, Gamers2, con el que participa, de otra forma, en las competiciones internacionales, un fenómeno que ha irrumpido con fuerza en los últimos años y se abre camino en España.

Tal es su acogida en nuestro país que este fin de semana se disputan las finales de «League of Legends Championship Series» (Europa), un evento que bien podría equipararse a la Liga de Campeones por expectación.

Salvando las distancias, ambos escenarios se pueden comparar. Un jugador profesional suele ser disciplinado, entrenar diariamente muchas horas, analizar estrategias y examinar las tácticas de los equipos rivales de cara no solo a su superación personal, sino a ganarse el pan con ello. Pocos llegan a vivir de jugar, es cierto, «un porcentaje muy pequeño consigue ser profesional», asegura a ABC Carlos Rodríguez, de 24 años, quien destaca que «no solo se trata de tener talento, sino de trabajar duro».

Es precisamente el camino que ha emprendido Benjamín Corpas, alias «Fabio__85», que concilia estudios y trabajo con su pasión, los videojuegos, en donde ha conseguido ser campeón del Torneo Apertura PES Liga BBVA 2015 celebrado en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe recientemente. Pero él reconoce que «no hace falta tirarte cinco horas diarias de entrenamiento para mantener un buen nivel». Experto en el simulador de fútbol «Pro Evolution Soccer», este madrileño de 29 años asegura que asistir a este tipo de eventos «se disfruta incluso más» que un deporte tradicional, «porque es uno quien maneja los jugadores» y «se pueden ver situaciones drásticas en el último minuto» que consiguen cautivar al espectador.

Más dinero en premios

La competición de videojuegos profesional cada vez está ganando mayor repercusión. En el presente año, los torneos han repartido más de 25 millones de euros en premios. El pasado año se superó el doble del anterior, cuando se dieron unos 14 millones de euros. Pero hace cinco años apenas se llegó a los dos millones, lo que demuestra que la recompensa por la que luchan en diversas competiciones son cada vez mayores. Solo en el llamado «Call of Duty Championship», especializado en la saga bélica, se reparte al ganador casi un millón de euros.

El negocio crece, y no únicamente de la venta de software (juegos) y hardware (consolas, PC y accesorios) que ha conseguido que la industria de los videojuegos en conjunto genere más dinero que el cine y la música juntos. El pasado año la final de un videojuego se disputó en el estado de Seúl ante más de 40.000 personas, una situación más que demuestra que ver jugar es tan divertido o más que jugarlo, como en los deportes tradicionales donde los aficionados asisten emocionados para ver a los cristianos, messis, gasoles o nadales del videojuego.

Hace una década se empezaron a popularizar en países asiáticos, pero cada vez se va haciendo un hueco en España, donde la Liga de Videojuegos Profesional se encarga de dirigir las ligas oficiales, y su director, Sergi Mesonero, explicó en una entrevista a este diario que los implicados son «profesionales en sentido estricto que cobran un sueldo de sus clubes por jugar, como si de futbolistas se tratara».

Otro de los jugadores profesionales de mayor renombre en nuestro país, junto a Alvar Araneae Martín («Araneae») o Pedro Moreno («LucifroN»), es el murciano Enrique Cedeño-Martínez, alias «xPeke», que a sus 22 años es todo un veterano en estas lides. Exmiembro de Fnatic, organización de «gamers» profesionales, el pasado año creó Origen, su propio equipo. Especialista en «League of Legends», dedica hasta ocho horas al día a entrenar como si se tratase de un deporte convencional.

«Entrenamos incluso más, porque al ser un deporte mental requiere de estar pendiente de tu cerebro», señala a ABC. A su juicio, «se te tiene que dar bien. El simple hecho de echar muchas horas no quiere decir que se te dé bien. Si ves que llevas tiempo y mejoras puedes tener futuro. Hay casos en los que se les ponen un salario. Actualmente, los equipos se han profesionalizado».

Ver los comentarios