El PC continúa soltando lastre

No es posible olvidar las premoniciones que se llevan publicando desde hace un lustro. En ellas, se decía tajantemente: «La muerte del PC». Tal vez no haya sido demasiado acertado vaticinar la eliminación de un concepto de informática, presente principalmente en el entorno laboral, que asiste a una profunda transformación. Pero los datos sobre el papel dejan claro un cambio de tendencia. La venta de ordenadores personales ha vuelto a caer, en concreto, un 10.6% en el cuarto trimestre del año y registra así el cuarto año consecutivo que vive esta tendencia.

Las ventas anuales, que han pasado por debajo de los 300 millones de dólares, se encuentran ya en el nivel más bajo desde 2008, según los datos recopilados

por la firma de investigación International Data Corporation (IDC). En este periodo se enviaron unas 71.9 millones de unidades, siguiendo las estimaciones previas, pero supone la mayor disminución de la historia de esta sector, superando las cifras de 9.8% por debajo registrado en 2013. Estos datos contrastan con los ofrecidos por Gartner, que estima que las ventas de PC llegaron a 75.7 millones de unidades, lo que representa una disminución del 8.3% respecto al cuarto trimestre de 2014.

El resultado de este escenario es que el mercado global de PC's tradicionales sigue en una profunda crisis, canibalizado por la popularidad de los dispositivos móviles que pueden conectarse a internet como tabletas y teléfonos inteligentes y que, en líneas generales, suple las tareas principales diarias de la mayoría de usuarios. Los expertos creen que la delicada situación de China actualmente, principal mercado en número de consumidores potenciales, está detrás del debilitamiento de las ventas de este tipo de aparatos electrónicos. «El mercado de PC sigue siendo muy competitivo», señala Loren Loverde, vicepresidente de IDC.

Sin embargo, los expertos se muestran optimistas al considerar que la plataforma Windows 10, que ya ha registrado más de 200 millones de usuarios desde su lanzamiento, ayudará a aumentar la venta de ordenadores a lo largo del presente año. «La adopción de Windows 10 por parte de empresas y consumidores deben acelerar las compras para estabilizarse en el segundo semestre del año. La mayoría de los usuarios han retrasado sus compras, pero no pueden hacerlo indefinidamente sin hacer frente a los problemas de seguridad y de rendimiento», sugiere.

«La confianza del consumidor hacia el PC sigue siendo un reto, aunque es evidente que hay focos de crecimiento», añade por su parte Jay Chou, analista de IDC. Como respuesta, los fabricantes desarrollan cada vez más dispositivos que unen dos conceptos (movilidad y productividad) para escapar de las rutinas a las que están acostumbrado los ordenadores tradicionales. Así, los expertos reconocen que los portátiles híbridos y las tabletas desmontables han comenzado a crecer rápidamente, aunque es pronto para atestiguar un cambio de tendencia. El impacto de esta incipiente categoría para este 2016 «será más grande».

Lenovo, líder de ventas

En este escenario, Lenovo se ha convertido en el principal proveedor de ordenadores convencionales tras registrar un gran crecimiento (más del 20%) en el último año. Detrás de la firma china, que aspira a adentrarse en el mercado de la telefonía móvil de la mano de su nueva filial Motorola, se sitúan dos veteranos del sector, HP y Dell, así como Asus y, en cuarta posición, Apple.