En «El libro Guinness de los récords» hay hazañas de tantos tipos que muchos ya no saben qué inventar para entrar en él. Simon Berry, aficionado a los deportes extremos, se propuso mojar una galleta en una taza de café saltando desde 70 metros y lo ha conseguido. Ahora su salto acumula miles de visitas en YouTube .
Simon Berry calculó bien la extensión y elasticidad de su cuerda y pudo batir el récord. Nadie podrá negarle que tiene puntería y que se juegó el tipo en su intento por entrar en «El libro Guinness de los récords» . Berry, para celebrar su éxito, recibió el premio como lo consiguió: colgado como un murciélago.
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión