Kroos e Isco fueron los que más corrieron, pero el resto del equipo bajó de kilómetros

El Real Madrid denotó cansancio en Mestalla. Fue el partido que menos kilómetros hizo el equipo en un partido de Liga. Kroos volvió a ser el madridista que más metros cubrió en un encuentro, 11,1, pero no alcanzó los 11,6 kilómetros de otras veces. Isco también dio todo lo que pudo y corrió 10,7 kilómetros. En otras ocasiones llega a 11,2. El resto del equipo descendió en sus baremos. Esa es la primera clave de la primera derrota después de veintidós victorias.

James se quedó en 10,5 kilómetros, que es una buena cifra, pero el problema principal está en los tres delanteros. No bajan. No defienden. Hacen entre 8,5 y 9,5 kilómetros y no taponan a los laterales ni a los centrales.

Los valencianistas derrotaron al Madrid porque sus laterales fueron dos centrocampistas más, libres de marca. Kroos e Isco se entregaron por frenar esa superioridad. El entrenador madridista subrayó también que el Valencia no paró de realizar faltas y el líder sucumbió en un partido bronco.

Ancelotti destacaba el derroche físico de sus hombres en los últimos veinte minutos en la búsqueda del empate. Pero el Real Madrid acusó falta de velocidad. No tenía la chispa de noviembre. Las interrupciones constantes del juego por parte valencianista impidieron a los blancos poder desplegar su rapidez en ataque.

El entrenador deberá preparar al grupo para recuperar esa punta de velocidad que marca la diferencia. Y ha manifestado que tendrá que realizar más rotaciones que nunca para atacar nueve posibles partidos en treinta días y evitar las lesiones de sus titulares.