Real Madrid-Blatter-Platini, el desencuentro

El enfrentamiento entre el Real Madriod y los presidentes de la FIFA y de la UEFA tiene argumentos y calado. Nunca en la historia, el club blanco se había encontrado con presidentes de los máximos organismos internacionales que le competen, que hicieran campaña contra sus futbolistas por omisión. La falta de democracia e igualdad preside, nunca mejor dicho, a Blatter y Platini, jefes del fútbol universal y europeo respectivamente. En el transcurso de un año, el club madrileño ha emitido duros comunicados contra uno y otro dirigentes, ante su ausencia de la más mínima equidad y educación.

Hace un año, Blatter, este vetusto dirigente de la FIFA que no sabe qué hacer para poder jugar en Qatar a cincuenta grados de calor el Mundial 2020, intentó ridiculizar a Cristiano y se ridiculizó él mismo con aquella actuación de chiquilicuatre contra Ronaldo y en favor de dar el Balón de oro 2013 a Messi.

Ganó el portugués, demostrando el directivo suizo su nula influencia si no hay federaciones que dependan de su dinero.

Ahora, Blatter, otra vez Blatter, ha dicho que el Balón de Oro 2014 debía ser para Neuer. Lo hizo el mismo día que surgió la lista de candidatos. ¡Qué casualidad!. Intentaba mediar para que venza el alemán. Y Ancelotti le respondió con sinceridad. «No entiendo que un presidente de la UEFA diga que debe ganar un jugador».

Inmediatamente después, como una competencia de celos, de quién vale más, Michael Platini, presidente de la UEFA, quiso influir también en este Balón de Oro 2014, que se entrega el 12 de enero, y manifestó que lo debía ganar un alemán, por ser campeones del mundo.

El francés ha continuado manifestando este voto durante todo un mes. Al ser acusado desde España de parcialidad, adujo que en 2010 dijo que deberían ganarlo Xavi, Iniesta o Sneijder. Lo obtuvo Messi hace cuatro años, en otra demostración de la nula fuerza que Platini, al igual que Blatter, tienen entre los profesionales del fútbol y los periodistas.

El Madrid ha realizado ahora un duro comunicado contra la parcialidad y la falta de equidad de Platini, como lo hizo hace doce meses con Blatter. El desencuentro tiene razones de peso. Los dirigentes más importantes del fútbol no demuestran ni un atisbo de democracia. Blatter pidió perdón a su manera hace un año, al Madrid y a Cristiano. Platini no lo hará. La grandeur le domina.