MAYA BALANYÁ

Ruta por las churrerías más castizas de Madrid

La tradición nunca falla para aliviar el frío mañanero: en navidades, nada sienta mejor que unos delicisios churros con chocolate

Madrid Actualizado: Guardar
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Hay vida más allá de San Ginés. Es la churrería por antonomasia de la capital, la que hay que enseñar a los amigos que vienen a conocer la ciudad, pero en Madrid hay muchas más opciones para disfrutar de una exquisita degustación de churros con chocolate. Ya sea para tomar un desayuno potente o para darse un homenaje en la merienda, estos seis establecimientos harán las delicias de los amantes del ancestral arte de la churrería, cuyo origen aún nos es desconocido a día de hoy. Se dice que los primeros que los cocinaron fueron los chinos (los llamaban «youtiao» y eran tiras de masa frita), y que los portugueses trajeron la receta a Europa y le añadieron el azúcar.

Otra teoría adjudica el invento a los árabes, pero en cualquier caso, en nuestro país empezaron a extenderse a principios del siglo XIX, poniéndole el nombre de «churro» por su forma parecida a la de los cuernos de la oveja churra. Doscientos años después los churros con chocolate ya han conquistado medio mundo, pero las verdaderas delicatessen sólo se encuentran en locales como estos, donde la tradición manda por encima de todo.

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  1. Las Farolas

    Cafés de todo tipo y procedencia, croissants, porras, tostadas y demás dulces acompañan en la carta a los churros con chocolate en este céntrico local, cuya decoración luminosa y agradable invita a tomarse el desayuno con mucha, mucha calma. Sus camareros suelen salir con una bandeja de churros a la calle Mayor para seducir a los viandantes con una pequeña degustación, así que suele estar bastante animado.

  2. La Antigua Churrería

    Don Julio Quiroga implantó el oficio en la familia en 1913, al abrir su primera churrería en el barrio de Ventas. Cuatro generaciones después, la dinastía Quiroga sigue cocinando con los secretos que les transmitió su bisabuelo, Hay otras cinco chocolaterías de la marca diseminadas por Madrid, incluyendo una en Alcorcón, y realizan envíos gratuitos a domicilio a con pedidos superiores a 20 euros.

  3. Los Artesanos 1902

    Cinco generaciones de churreros avalan este local dirigido por Don Gaby, que aprendió el oficio de su padre Don Galo, aleccionado a su vez por Don Florencio, quien abrió la primera churrería de la familia en la calle Ave María en 1902. La elaboración artesanal y el trato cercano son las marcas de la casa, y ofrece una amplia carta de chocolates y repostería. En enero celebrarán su 115 aniversario por todo lo alto.

  4. La Andaluza

    Entre los mejores churros, porras y buñuelos que se pueden comer en el barrio de Tetuán están los de este pequeño local ubicado muy cerca de la plaza de Cuatro Caminos, en el que presumen de cocinar con un aceite de primera categoría. Aunque los fines de semana suele ponerse hasta los topes, la calidad del producto, los precios populares y el ambiente amistoso compensan con creces.

  5. Siglo XIX

    En sus dos sedes (una en Vallecas, la otra en San Sebastián de los Reyes), Siglo XIX ofrece calidad y rapidez en el servicio. Además de las clásicas variedades de churros y porras (bañados en chocolate o simplemente en azúcar), tienen un chocolate líquido frío que hace furor todos los veranos. También ofrecen cursos para aprender a hacer masas, freir y servir, y asesorar en la selección de maquinaria, harina y aceite.

  6. La Madrileña

    El clasicismo castizo lo inunda todo en esta chocolatería de ambiente relajado y tranquilo, cuya terraza es uno de esos lugares donde uno puede tomarse unos churros caseros leyendo el periódico plácidamente bajo el sol. Además son grandes especialistas en la elaboración de crepes, tortitas, gofres y batidos, y cuentan con una gran variedad de tés, cafés e infusiones.

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