Siete claves para entender 'The Handmaid's Tale'

La ganadora del Emmy a mejor serie dramática es un producto complejo sobre un mundo distópico con referencias reales

Offred y Ofglen, habitantes de la República Gilead.

José Juan López

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Offred y Ofglen, habitantes de la República Gilead.

Gilead: un estado totalitario con algunos paralelismos con la realidad

El pasado domingo “The Handmaid’s tale” se hizo con el premio Emmy al mejor drama de ficción de 2017. Por primera vez en la historia de estos premios, una serie realizada exclusivamente para su difusión por internet (producida por Hulu) y no desarrollada por una cadena de televisión convencional, se hacía con el galardón. La serie, basada en el libro homónimo de Margaret Atwood publicado en 1985, describe una distopía cuanto menos turbadora por sus puntos de encuentro con la realidad.

(Este artículo contiene ‘spoilers’)

Pero, ¿qué hay que saber para entender esta serie?

Estamos en 2017, en un estado de Gilead, localizado en la actual Norteamérica. Es un país ultra conservador y religioso en el que ninguna de sus mujeres tiene tipo alguno de autoridad ni poder. Gran parte de las féminas del país están estériles y apenas hay nacimientos. Con el objetivo de remontar la natalidad, aquellas mujeres fértiles son educadas para ser las que engendren a los hijos de los hombres poderosos y ricos del país. Su única función, por lo tanto, será la de engendrar hijos de otros.

No hay revistas, ni cine, ni libros más que los autorizados; el aborto o las relaciones homosexuales están castigadas con la muerte; existe un estricto código de vestimenta y de comportamiento: las mujeres de los líderes visten de azul (como se representa a la Virgen María), mientra que las criadas van de rojo (como la pecadora María Magdalena); existen estratos sociales claramente diferenciados y de los que no se puede salir: las “criadas” -vientres andantes y gestantes- , los comandantes o líderes y sus mujeres e hijos (el estrato más favorecido de la sociedad), los “Ojos” -espías de incógnito del régimen-, las “tías” - educadoras de criadas- , o las “Marthas” -limpiadoras, cocineras o mujeres de servicio que no pueden tener hijos-, y el resto de la población.

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Offred, la criada protagonista de 'The Handmaid's Tale.

Offred: la criada

El peso de toda la ficción recae en la ganadora del Emmy a la mejor actriz de serie dramática: Elisabeth Moss , quien ya había sido nominada varias veces por su papel de Peggy Olson en “Mad Men”. June, su nombre antes de convertirse en criada, está casada y tiene una hija. Cuando el nuevo gobierno totalitario y ultraconservador se hace con el poder y establece el represivo régimen de la República de Gilead (esto ocurre tras una serie de atentados terroristas… y que cada uno establezca las similitudes con el futuro que considere oportunas), June intenta escapar con su familia, pero es interceptada por agentes del régimen y separada de ella.

Es entonces cuando empieza su educación como criada, cuando por primera vez aprende que no tiene que levantar la vista del suelo, que tiene que vestirse con una túnica roja y una cofia blanca, que no tiene opinión ni voz y que, para sobrevivir, su única opción es permanecer callada, obedecer y ser capaz de engendrar a los hijos de la familia a la que ha sido encomendada como vientre gestante. Ahora ya no es “June”, sino “Offred”, del inglés “of Fred” (“de Fred”, por Fred Waterford, el comandante al que sirve). Ahora es una posesión, no una persona. Como lo son todas las demás: Oglen, Ofwarren, etc.

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Offred es obligada a mantener relaciones durante la 'Ceremonia'

La ceremonia

Una vez al mes tiene lugar la “Ceremonia” , un acto “sagrado” que, bajo el pretexto del precedente bíblico del libro del Génesis en el que Raquel -que no puede engendrar hijos propios- le pide a su esposo Jacob que tenga hijos con su criada, justifica la violación continuada y autorizada de las criadas.

Tras leer el comandante el pasaje bíblico, su mujer sujeta las manos de la criada, que coloca la cabeza entre sus piernas mientras el marido tiene sexo con ella. De este modo, la criada es sólo un “contenedor” en un acto frío y turbador, en el que, salvo contadas ocasiones, no se ofrece resistencia alguna.

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Las criadas de Gilead en una de sus habituales reuniones.

Las otras criadas

La mejor amiga de Offred en el mundo en el que era June es Moira (papel interpretado por Samira Wiley, de “Orange is the New Black”). Ambas coinciden en la escuela de criadas y Moira promete ayudar por todos los medios a June a encontrar a su hija. Sin embargo, la primera consigue escapar y pasar la frontera sin June. Nada sabemos de ella hasta que el comandante lleva una noche a Offred más allá de la frontera (no del país, sino de la zona “segura”): la maquilla, le suelta el pelo y le pone un vestido brillante, todo prohibido por las leyes vigentes en Gilead. Tras un corto viaje en coche, entran en una especie de burdel, lleno de mujeres maquilladas y mínimamente vestidas, que fuman y beben mientras entretienen a hombres elegantemente vestidos.

Entre esas mujeres se encuentra Moira, que ahora se ha convertido en una “ jezabel ” (por la reina Jezabel del Libro de los Reyes, quien alejó a su marido, el rey Acab, del verdadero Dios para abrazar a otros dioses paganos). Las “jezabel” son mujeres convertidas en prostitutas, que no pueden tener hijos o han sido esterilizadas pero que, por su mal comportamiento, no pueden ocupar otros estratos o puestos en la sociedad.

Las criadas siempre salen a la calle de dos en dos. La compañera de Offred es Ofglen (a la que da vida Alexis Bledel, de “Las chicas Gilmore” en un papel absolutamente opuesto al cándido de Rory Gilmore). Es ella quien descubre a Offred la existencia de un pequeño grupo de personas que preparan una rebelión (Mayday). Sin embargo, se descubre que ha tenido una relación con una de las señoras y es castigada: ella va a aislamiento y la amante, que no puede tener hijos, es ahoracada ante sus ojos. En su vida antes de ser Ofglen, está casada con otra mujer y tienen un hijo. Su esposa y su hijo logran escapar a Canadá.

Janine ( Ofwarren ) es una de las criadas que, a lo largo de esta primera temporada, tiene un bebé. En la ceremonia del parto, mientras la criada dilata entre fuertes dolores por las contracciones, su señora está en la planta de abajo comiendo pasteles y bebiendo té mientras que simula, rodeada de otras señoras, esas mismas contracciones. Justo antes de parir, la señora sube a la sala donde está la criada y, como en la Ceremonia, se coloca la cabeza de la sirvienta entre sus piernas y simula el parto. Janine tiene graves problemas de comportamiento y ciertos desequilibrios mentales y, por esa razón, en los primeros capítulos es castigada y pierde un ojo. Cree sinceramente que su señor está enamorado de ella, que va a dejar a su mujer y se va a escapar con ella y el niño.

Lo que une a todas estas mujeres es que sus cuerpos son politizados, son propiedad única y exclusiva del Estado. Estas mujeres no sólo no tienen ningún control “físico” sobre sus cuerpos, sino que cualquier principio ético o moral, la voluntad, la libertad o cualquier derecho humano en favor de la mujer es totalmente coartado en pro del supuesto bienestar y propiedad del estado y la nueva sociedad.

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La tía Lydia, una de las secundarias de la serie.

La tía Lydia y la señora Serena Joy Waterford

La tía Lydia es la educadora de las criadas. Es inflexible y cumple las reglas estrictamente. Sin embargo, se atisban ciertos rasgos de humanidad y compasión en su mirada. Se nota cierto afecto por algunas de las criadas (como Janine).

La tía Lydia reúne a las criadas por varios motivos: cuando alguna de ellas va a parir (la acompaña durante el parto con la respiración, por ejemplo); cuando, tras dar a luz, abandona una casa para servir en otra; o cuando se produce algún acto punitivo. Para este último punto, las reúne a todas al aire libre. En uno de estos actos podemos ver cómo las criadas son obligadas a matar a golpes a un hombre acusado de haber violado a una criada; o cómo intenta castigar a Janine por rebelarse y querer llevarse a su bebé con una ceremonia de lapidación en la que, en una acto de suma rebeldía y significación para el futuro, Offred lidera la “insumisión” del resto de las criadas, que se niegan a apedrear a su compañera.

Serena Joy Waterford es la esposa del comandante. Terriblemente obsesionada con tener un hijo, martiriza y castiga sádicamente a Offred cuando descubre que no está embarazada, o cuando se da cuenta de la relación que tiene con su marido. Ella, que había sido una importante intelectual y activista antes de la llegada del nuevo régimen -que ella misma ayuda a diseñar-, acepta su papel sumiso e insustancial en la nueva sociedad, pero el gran peso de la frustración y la ambición no completa la hace un ser cruel y lleno de ira.

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Fred es el comandante al que Offred tiene que dar un hijo.

Personajes masculinos: Fred Waterford, Nick y Luke

Fred Waterford es el comandante al que Offred tiene que dar un hijo. Es un alto cargo en el gobierno.

En los primeros capítulos, Fred Waterford invita a Offred una noche a su oficina, donde juegan al Scrabble y charlan. Un día, le deja una revista de moda (una del tipo Cosmopolitan) sólo para ver el gesto de agradecimiento y profundo placer con el que la criada devora la revista que, en la actual sociedad, está absoltamente prohibidas. En uno de los encierros a los que es sometida por su señora, descubre en su habitación varias marcas sobre el marco de una puerta de su antecesora, que se suicidó en esa misma habitación asfixiada por la presión y la crueldad de sus “amos”. Por este motivo, y por mero instinto de supervivencia, Offred se ve obligada obedecer sin rechistar a su señor y hacerle creer que está, en cierto modo, enamorada de él como lo estuvo (y hacía que lo estaba) su predecesora.

El hecho de que Waterford conozca el burdel de las jezabel y lo frecuente es una muestra más de la hipocresía de la élite masculina del nuevo estado, que es capaz de castigar a otros comandantes por tener relaciones con sus criadas que vayan más allá de la Ceremonia.

Nick es el chófer de Waterford , su hombre de plena confianza. Cuando se está gestando el nuevo estado, es captado por uno de los líderes de la futura nueva república, que le ofrece un trabajo seguro y estable a cambio de su total lealtad y obediencia. Nick, además, es es miembro de los “Ojos”, un grupo de personas totalmente fieles al régimen que viven entre todo tipo de miembros de la sociedad y actúan de espías para el gobierno, reportando cualquier tipo de irregularidad y atentado contra la ley.

Nick y Offred comienzan una relación amorosa que genera contradicciones en ambos: en June porque recuerda a su marido (que piensa que está muerto) y en Nick porque está traicionando su misión y a su gobierno. Cuando después de varios intentos Offred no se queda embarazada, Serena Joy Waterford empieza a considerar que tal vez es su marido el estéril, por lo que obliga a Offred a mantener relaciones con Nick en búsqueda del ansiado embarazo.

Luke es el marido de June. Casado en segundas nupcias con ella, tienen una hija. Con la llegada del nuevo estado, este matrimonio es considerado ilegal y su hija, ilegítima, por esos son perseguidos. En la persecución, Luke se separa de su mujer e hija. Se oye un disparo y June piensa que su marido ha sido asesinado. Sin embargo, en los últimos capítulos de la primera temporada descubrimos que el marido, tras ser herido, consigue escapar y se a un grupo de rebeldes para, finalmente, escapar a Canadá.

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Las criadas, escandalizadas ante un atropello.

La semilla de la rebelión

En los últimos capítulos , una vez que Selena Joy Waterford se ha enterado de que Offred está embarazada (de Nick, teóricamente), la señora decide llevarse a la criada a otro lugar de la ciudad. Sale del coche y deja a Offred encerrada. Desde el vehículo, Offred ve cómo la señora Waterford habla con su hija. Desesperada, intenta salir del coche, pero no lo logra. Cuando la señora vuelve al coche amenaza con hacerle daño a su hija si ella daña al bebé que tiene en su vientre.

La primera temporada de la serie acaba dejando ver el primer paso que Offred da para participar en la rebelión: una de las criadas que participará en el Mayday y con la que ha logrado contactar, le pide que vuelva al burdel y que recoja un paquete. Logra convencer a Waterford y van de nuevo, pero necesita que Moira (conocida ahora como Ruby) la ayude en su misión. Sin embargo, su amiga se niega a prestarle ninguna ayuda, reducida por el miedo y la desesperación. Moira se muestra desesperanzada, sin fuerza ni valor para participar en una revolución; no ve que exista ninguna posibilidad de hacer que la situación cambie. Offred abandona el burdel profundamente desolada, con el miedo a no ser capaz de escapar nunca de esa tiranía. A los pocos días de este suceso, en una de sus compras habituales, el carnicero le entrega un paquete de más que viene acompañado de una nota de Moira. Finalmente, ha sido valiente, se ha rebelado: mata a un cliente, se viste con sus ropas, le roba el coche y logra huir a Canadá donde, como ya mencionamos, se reúne con Luke.

Una vez en la casa, Offred abre el paquete que le mandó Moira y descubre su contenido: cientos de cartas de mujeres que denuncian su situación como criadas y recuerdan sus nombres del pasado y a sus familias y amigos.

En el último capítulo, vemos como una furgoneta negra viene a llevarse a Offred. Nick le susurra al oído que vaya con ellos y que confíe en él. Mientras sale de la casa, con la cabeza alta y segura, le dice a Rita (la “Martha” de su casa) dónde están las cartas, que ha escondido en el baño.

Todos estos son detalles, creemos, fundamentales para el desarrollo de la segunda temporada de la serie, sin fecha aún ni de grabación ni de lanzamiento.

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