Concert Music Festival

Camilo: «Mi hija Índigo es de Cádiz»

El cantante colombiano ofreció una mágica noche de amor a su 'tribu' en el Concert Music Festival de Sancti Petri

Camilo hizo vibrar a su tribu en Chiclana. Antonio Vázquez
Verónica Sánchez

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Horas antes de que Camilo se subiese a las tablas del Concert Music Festival de Sancti Petri, los alrededores del poblado marinero ya hacían presagiar lo que iba a ocurrir. Lleno total en un concierto en el que predominó el amor que irradia el cantante colombiano y del que es parte su 'tribu', como denomina a sus seguidores. Una tribu formada por familias enteras, en las que grandes y pequeños se entregaron a una noche mágica en Chiclana.

Bajo el símbolo del tipi indio, que engloba a la tribu de Camilo, salió el cantante a escena, vestido completamente de blanco y con los pies descalzos, emitiendo una energía que no se terminó hasta dos horas y 19 temas después. 'Kesi' fue el tema elegido para abrir el concierto mientras las manos de sus seguidores dibujaban corazones y tipis. Seguidores que no perdieron la ocasión de dibujarse el conocido bigote de Camilo, equiparse con camisetas hechas para la ocasión y, sobre todo, sacar pancartas. Decenas de ellas abarrotaban la pista y las gradas. Llenas de colores, con divertidos mensajes que Camilo, en un momento del concierto, empezó a leer: 'No me llamo Eva pero te bajaría la luna', 'La tribu del Liceo', 'Te amo Camilo', 'Estar con vosotros es mi mejor regalo', 'Camilo, Cádiz te quiere', «y yo quiero a Cádiz», respondió.

«Qué bonito estar aquí de nuevo», dijo el cantante, que el año pasado ya actuó con gran éxito en el mismo lugar. «Es una fortuna para nosotros volver a este lugar y tener la bendición de poder traer a mis papás que no lo conocían», desveló, al tiempo que contó que ya se conoce tan bien Cádiz que incluso ha estado haciendo de guía para sus padres.

A 'Kesi' le siguieron 'Ropa cara', 'Favorito', 'Pesadilla', 'La mitad' y 'Manos de tijera' y justo después de esta canción llegó uno de los momentos más emocionantes del concierto. Camilo pidió que le pasaran una de esas pancartas con mensajes de sus seguidores y que subieran al escenario al autor de la misma. Y así fue. Fundiéndose en un abrazo con su seguidor, un joven con síndrome de down que, sin duda, guardará para siempre en su memoria ese momento que discurrió entre los aplausos de los presentes.

Un público que recibió a Eva Luna, esposa de Camilo y madre de su hija Índigo, con la que cantó 'Por primera vez' y 'Machu Picchu'. «El corazón siempre espera por el verdadero amor», dijo justo antes de presentarla y que saliese al escenario. Poco antes, Camilo había hecho un alegato a la esperanza, poniendo de relieve que, por muy mal que estemos en un momento dado de nuestra vida y creamos que no vamos a remontar, eso pasa, y vuelven los momentos felices.

'NASA', 'Buenos días', 'No te vayas', 'Millones' y 'Tatuaje' siguieron. Fue en el momento de interpretar 'Tutú' cuando el cantante colombiano volvió a dirigirse a su público con otro mensaje. «No hay nadie como tú», dijo, «no lo olviden». «Si algo me ha enseñado la tribu es el valor de la diversidad, de ser la persona que soy y celebrarlo. En un mundo en el que nos dicen que tenemos que parecernos a alguien más, tener no sé cuantos seguidores en Instagram o 'likes' para tener valor, comprar para lograr no sé qué cosa... Se nos pasa la vida tratando de ser la persona que no somos y perdemos la oportunidad de celebrar la persona que somos», narró.

'Bebe' y 'Vida de rico' fueron el preludio de un falso final. Ya que Camilo volvió a aparecer en escena, esta vez vestido de negro, para deleitar con los acordes de 'El mismo aire'. Poco después, el cantante pidió «tres minutos sin teléfono» durante los que interpretó 'De dentro hacia fuera', su nueva canción que sale en septiembre y que da nombre a la gira de conciertos.

Con 'Pegao' llegó a locura total. «Gracias Chiclana por seguir a mi lado creyendo que el amor es la más grande de las revoluciones». Y antes de la última canción, 'Índigo', dedicada a su hija y que Eva Luna interpretó con él, Camilo hizo una confesión sobre la 'nacionalidad' de la pequeña, que nació el pasado mes de abril. «Como saben yo soy colombiano y mi esposa venezolana y obviamente nuestra hija Índigo llevará nuestras nacionalidades», narró. «Hay tribus indígenas que no celebran el día del cumpleaños como el día en el que uno nace, sino el día en el que a uno lo 'llamaron a la existencia', lo 'encargaron'. Nosotros hicimos cálculos matemáticos y si a uno le dieran la nacionalidad y le celebraran el lugar, no donde uno nació, ni sus papás, sino donde a uno lo 'llamaron a la existencia', sin duda alguna, nosotros podemos decir con certeza que nuestra hija Índigo es de Cádiz».

Así, con esta confesión, Camilo rubricó el amor mutuo que tiene con Cádiz, su gente y su tribu. Una tribu de amor, música y buen rollo que arrasa allá donde va.

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