Ballenas: Japón alcanza su cuota de 333 ejemplares minke cazados en el Antártico, 207 eran hembras gestantes

La flota, formada por cuatro embarcaciones, ha permanecido cuatro meses de «expedición científica»

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La flota ballenera japonesa, compuesta por cuatro buques, ha regresado a puerto tras los 115 días que se ha dilatado su expedición en el Antártico.

Se trata de la primera incursión de la flota nipona en el océano Austral tras el fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en 2014, que prohibió la concesión de más permisos a Japón para la caza de ballenas al concluir que sus programas no «tienen fines científicos».

La flota arribó el pasado jueves a la ciudad de Shimonoseki, situada en el extremo suroeste de la isla de Honshū, en la prefectura de Yamaguchi.

Se ha conocido que Japón ha alcanzado la cuota de ejemplares de ballenas minke que tenía previsto cazar y que le permite la Comisión Ballenera Internacional: 333 (103 machos y 230 hembras, la mayoría de las cuales -un 90%-, eran gestantes), tal y como ha informado el Instituto de Investigación sobre Cetáceos de Japón, publica National Geographic.

Las ballenas han sido arponeadas en aguas antárticas desde diciembre concretamente, tal y como revelan las coordenadas facilitadas, dentro del Santuario de Ballenas del océano Antártico, el Santuario de Ballenas australiano y el mar de Ross, informa la ONG Sea Shepherd.

El centro, asimismo, ha comunicado que ha avanzado sobre el conocimiento que poseían sobre esta especie: han determinado que no existen seis stocks poblacionales de ballena minke en el Antártico, sino solo dos, pero muy grandes, dado que el alimento en la zona es abundante y permite su rápido crecimiento, informa el portal CSMonitor.

«Tan solo un año y medio después de que la CIJ dictaminara la ilegalidad del programa ballenero japonés y unos meses después de que una corte federal australiana sancionara con un millón de dólares a los balleneros japoneses por matar ballenas ilegalmente dentro del Santuario de Ballenas australiano, el gobierno japonés ha autorizado otra matanza masiva de rorcuales aliblancos protegidos en el océano Austral. Este acto deshonesto es un flagrante desprecio de las regulaciones internacionales y la diplomacia y establece un peligroso precedente para todas las naciones que respetan el estado de derecho», ha manifestado el capitán Alex Cornelissen, CEO de Sea Shepherd Global en un comunicado compartido por la organización en su perfil de Facebook.

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