Erasmus+EduBiomed, primer y único programa académico internacional sobre reservas de biosfera

Después de 40 meses de trabajo y de la implicación de más de 150 personas, entre profesionales y universitarios de cinco países (España, Italia, Francia, Líbano y Marruecos), la Universidad Autónoma de Barcelona, con la colaboración del Centro Internacional Unesco para las Reservas de Biosfera Mediterráneas (UnescoMed) ha culminado el proyecto Erasmus+ EduBioMed, el primer y único programa académico internacional relacionado exclusivamente con las reservas de biosfera. Un buen ejemplo de conexión y diálogo entre conocimiento, universidades y personas con los territorios de forma horizontal, con el paradigma común de la conservación de la biodiversidad y el desarrollo de las comunidades que habitan las reservas de la biosfera.

Los dos años de pandemia obligaron a la doctora Roser Maneja, directora del Erasmus+ EduBioMed, a modificar el primer objetivo de la movilidad internacional por una apuesta por la movilidad nacional, principalmente en Líbano y Marruecos . «Nos hemos dado cuenta de que la movilidad interna de los estudiantes del máster en sus países de origen es el paso natural para que, junto a los profesores, conocieran más sus reservas de biosfera». En total, se han movilizado 700 estudiantes de Marruecos y Líbano y 90 investigadores de ambos países en un centenar de desplazamientos con 35 proyectos de investigación y educación que involucra a 80 estudiantes y 25 investigadores.

La experiencia también ha puesto «las bases de actualización de los currículos académicos para ver las reservas de la biosfera como laboratorios de experimentación, gobernanza y políticas públicas y que desde las universidades debemos promover nexos con los territorios para que el conocimiento de la academia trascienda a las reservas de biosfera y a la inversa». Otra conclusión es la propuesta de dos másteres internacionales de reservas de biosfera mediterráneas para ampliar a los diecisiete países que integran la red del centro UnescoMed y buscar la complicidad de sus respectivas universidades. Otra de las conclusiones de este programa ha sido abordar las reservas como territorios Next Generation UE para desplegar nuevas estrategias de economía circular, energía, etcétera para dar cobertura a nuevas políticas europeas y globales. La creación de aplicaciones tecnológicas para trasladar la ciencia a la ciudadanía e incorporar a los usuarios de las reservas de biosfera como conocedores y aportadores de datos a las investigaciones, son otros de los hitos del proyecto. También se ha elaborado un curso abierto o «MOOC» sobre reservas de biosfera en el que han participado sus gestores y profesores universitarios de diversos países. El curso se estructura en cinco módulos con 28 conferencias magistrales que derivan en ejercicios online. Quienes lo realicen, contarán con un certificado de superación.

Además de identificar lagunas y de formular recomendaciones a las instituciones, en especial a los ministerios del Líbano y Marruecos, preparan la publicación de un libro electrónico o e-book en cuatro idiomas (francés, inglés, español y árabe) que recoge las reflexiones sobre reservas de la biosfera de 50 autores y casos de éxito y no éxito en la cuenca mediterránea. La doctora Mari Carmen Romera, del Centro UnescoMed, abunda en la influencia del proyecto Erasmus+ EduBioMed en Marruecos al margen de las aulas, al haberse establecido convenios de colaboración entre asociaciones locales dentro de las reservas de biosfera con las universidades del centro y norte del país.

Tras la etapa introspectiva a que ha obligado la pandemia y el consiguiente «adormecimiento» de algunas de sus actividades, ahora se produce un relanzamiento y un fortalecimiento de los lazos y la colaboración de la red. L os proyectos desde el Centro UnescoMed recalan en una mejor comunicación en redes sociales, web y actos divulgativos, además de los debates científicos. También trabajan en completar el fondo de documentación con la inclusión de reservas que colaboran de una forma más pasiva. Todo ello en aras de consolidar con los gestores de toda la red un plan de acción participativo que acabe convirtiéndose en una red formal de los diecisiete países integrantes.