Todo sobre el último Audi R8

Aunque el parecido estético con su antecesor es evidente, la segunda generación del Audi R8 (4,42 metros de largo, 1,94 de ancho y 1,24 metros de alto) encarna en realidad un súper deportivo completamente nuevo. Debuta en el Salón de Ginebra, llega a los comercios en verano y es entre 40 y 50 kg más ligero al estar fabricado esencialmente en aluminio y plástico reforzado con carbono CFRP.

Como antes, cuenta con mecánica central, situada justo por detrás del habitáculo biplaza pero por delante del eje trasero. En su estreno contará con motor de gasolina aspirado, de inyección directa y lubricación por cárter seco, como en competición, de 540 CV (R8 V10, con un paso de 0 a 100 km/h de 3,5 segundos y 323 km/h) o bien con 610 CV en variante R8 V10 Plus (0 a 100 km/h en 3,2 segundos y 330 km/h), beneficiada por la mecánica del Lamborghini Huracán.

Asocian cambio auto secuencial de doble embrague y siete velocidades S tronic como única posibilidad dotada de función de máxima aceleración desde parado Launch control y 'circulación a vela' desde 55 km/h (llaneando desacopla motor y transmisión para ajustar consumo).

Gracias a la última y a otros como el Stop&Start y el sistema de desconexión de cilindros Cylinder on demand acoplado, registra un gasto homologado medio de 11,8 l/100 km y de 12,4 l/100 km (R8 V10 y R8 V10 Plus, respectivamente).

Siempre quattro

En cuanto a la tracción, es total permanente quattro en toda la gama, con un nuevo embrague multidisco electrónico que permite pasar toda la fuerza mecánica a las ruedas traseras o a las delanteras según el agarre, detrás con un deportivo diferencial mecánico autoblocante para, en lo posible, evitar derrapajes acelerando en giros.

Dirección con asistencia eléctrica, suspensiones de aluminio mediante paralelogramo deformable, control electrónico de la amortiguación Magnetic Ride.... El R8 V10 Plus recibe una calibración de suspensión aún más firme y deportiva, frenos carbocerámicos y llantas de 20 pulgadas, todo ello previsto con sobrecoste para el R8 V10.

Ofrecerá modos de conducción comfort, auto, dynamic e individual, con cambios en la respuesta del acelerador, la resistencia de la dirección, el cambio S tronic, la tracción quattro y la suspensión Magnetic Ride. También contará con una opción performance mode que implica escape más ruidoso y control de estabilidad y tracción con tres modos de trabajo (dry, wet y snow), a manejar desde el volante.

Integra la instrumentación digital configurable estrenada por el nuevo TT, botón de arranque sobre el volante y faros LED, o bien láser opcionales como los estrenados por la edición limitada R8 LMX.

Incluso eléctrico

Hacia finales de año, Audi pondrá a la venta un R8 eléctrico llamado R8 e-tron. Contará con dos motores de 231 CV de potencia individual con una potencia conjunta de 462 CV.

Tomará la energía necesaria de una batería de iones de litio de 92 kWh con celdas distribuidas a lo largo del túnel central y transversalmente por detrás del habitáculo.

Ofrecerá una autonomía de 450 km y recargará en menos de dos horas. Su aceleración de 0 a 100 km/h se cifra en 3,9 segundos, mienras que su velocidad punta se limitará por electrónica a 210 km/h, o bien a 250 km/h con sobreprecio.