Beatriz Elorriaga, Íñigo Henríquez de Luna y Percival Manglano, ayer, antes del «examen»
Beatriz Elorriaga, Íñigo Henríquez de Luna y Percival Manglano, ayer, antes del «examen» - óscar del pozo
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Los «elegidos» de Aguirre prefieren listas electorales abiertas

Elorriaga, Henríquez de Luna y Manglano, se someten al «examen» creado por su presidenta regional del PP

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Con una apuesta por las listas abiertas, Íñigo Henríquez de Luna, Beatriz Elorriaga y Percival Manglano pasaron ayer su «audiencia pública» como candidatos a formar parte de la lista de Esperanza Aguirre al Ayuntamiento de Madrid para las elecciones del próximo 24 de mayo. Eran los tres políticos que se enfrentaban a este «examen» diseñado por Aguirre para dar «mayor transparencia» y que los votantes conozcan mejor a quienes les van a representar, si salen elegidos.

Como el día anterior, en el primer «examen», el «tribunal» estuvo compuesto por el exalcalde Álvarez del Manzano, por Luis Eduardo Cortés y por Cándida O’Shea.

¿Tienen ustedes cuentas en el extranjero o han cobrado en dinero B», se volvió a preguntar a los tres aspirantes.

Henríquez de Luna y Elorriaga dijeron que no. Sí disponen de «unos pequeños ahorros» y soportan una hipoteca con la que pagan su vivienda. Manglano, en cambio, admitió contar con una cuenta en Francia: «Es de cuando cobraba mi nómima mientras trabajé en la Unesco. La mantengo con algunos ahorros», aseguró.

El ahora jefe de campaña electoral del PP en Madrid, Henríquez de Luna, se comprometió a luchar por la transparencia con el dinero público. «Los corruptos –dijo– son muy listos».

Beatriz Elorriaga, que ha ocupado diversos cargos parlamentarios y de Gobierno autonómico, tuvo que describir parte de su currículum en inglés. Aprobado alto. Después, cargó contra los políticos corruptos y se negó a que «me metan, como a otros compañeros, en el mismo saco».

El más internacional, Percival Manglano, que sufrió buena parte del fallido proyecto Eurovegas, apostó por más cercanía con el ciudadano. «Los indignados también están en la derecha aunque la izquierda se haya adueñado de esa bandera».

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