Tan sólo una parte del espectáculo será proyectado en la fachada barroca
Tan sólo una parte del espectáculo será proyectado en la fachada barroca - m. muñiz

Los fuegos reciben el Día del Apóstol un año más

El Pazo de Raxoi y San Martín Pinario, nuevos protagonistas

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La llegada del 25 de julio se festeja de nuevo en Compostela. Para muchos lo más destacado del Día de Galicia, junto con la (más multitudinaria de lo normal) Misa del Peregrino, son los fuegos del Apóstol en la medianoche del día anterior. A pesar de las dificultades estéticas, las expectativas para este año no parecen ser bajas. Al menos 150.000 personas podrían asistir al despliegue de luz en la plaza del Obradoiro.

Este año se suma la celebración del 30º aniversario de la proclamación de Santiago como Ciudad Patrimonio. La temática del espectáculo girará por lo tanto alrededor de este acontecimiento y al gran número de peregrinos que han llegado a Compostela este año. La sensación 360º, con proyecciones sobre el Pazo de Raxoi (enfrente a la fachada barroca) añade dinamismo y diversidad.

Además, durante sus treinta minutos de duración, los asistentes podrán conocer a Paio, el descubridor de la tumba del Apóstol. Así mismo, la plaza de San Martín Pinario también contará con una pequeña dosis de esta escenografía. De esta forma, el limitado aforo del Obradoiro no le impedirá a todos aquellos interesados poder verlos desde este nuevo punto.

Paralelamente a esta ampliación de espacios apropiados para ver la exhibición, se encuentra la imposibilidad de visibilidad desde los balcones del ayuntamiento. Es por eso, por lo que se ha habilitado en el Hostal dos Reis Católicos un pequeño lugar en el que podrán estar tan sólo 200 invitados.

Después de que el día 19, la futbolista de la selección española Verónica Boquete diera el pregón desde el balcón del Pazo de Raxoi, la fiesta ha inundado Santiago. Conciertos y continuas actuaciones para todos lo públicos durante todo el día están marcando el tono festivo de la capital gallega. Así continuará hasta el día 31, cuando en el Campus Sur se cerrará el Apóstol 2015 con los tradicionales «fuegos pequeños». En esta ocasión sí será posible disfrutarlos desde los balcones de la parte de atrás del Pazo de Raxoi. Unas vistas privilegiadas.

Menos pirotécnico

Según ha explicado el responsable de la empresa encargada de gestionar la demostración de este año, ésta será 50 por ciento pirotécnica y 50 por ciento audiovisual. Se hará un repaso tanto por los lugares emblemáticos de la ciudad como por todas las fachadas de la Catedral. Más narrativa de lo habitual y con menos luces, en gran parte debido a las dificultades presentadas con el andamiaje y la pequeña estructura del Pazo de Raxoi, donde se quemará virtualmente la fachada principal. Un pequeño cambio en lo que ya ha pasado a ser uno de los acontecimientos más esperados del día conmemorativo del patrón de España. A las 12 de la noche y desde prácticamente toda la urbe, se podrán ver y, de seguro, escuchar el cambio de día 24 a 25. Con una seguridad más reforzada -se mantiene la prohibición de acceder con mochilas-, y un límite de plazas más reducido de lo normal, la entrada al Obradoiro ha de realizarse varias horas previas al inicio con el fin de conseguir sitio. La primera fila es siempre difícil de lograr.

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