Pazguato y fino

¿Y tú, de quién eres?

Quienes exigen al PP que condene el franquismo se niegan a hacer lo propio con Resistencia Galega

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Los gestos, ese elemento tan importante en la política de nuestros días, un intangible que alimenta los juicios de valor de nuestra opinión pública. No tienen resultados materiales, no generan efectos directos sobre la vida de los ciudadanos, pero nos dan la medida de nuestros representantes. Y de algunos medios de comunicación, también.

Por eso tiene un valor excepcional poner la verdad sobre el tapete de la actualidad y realizar análisis objetivos. Que en Podemos haya una dirigente vinculada a un despacho de abogados de un exmiembro del Exército Guerrilleiro, especializado en defender a terroristas de Resistencia Galega y demás calaña, no supone llamar terrorista ni a esa organización política ni al resto de sus militantes o dirigentes. Como tampoco son conniventes con Resistencia Galega los votantes de AGE por más que Beiras y algún monaguillo suyo se refieran a estos muchachos con una sonrojante condescendencia.

La información de ABC, contrastada con el rigor exigido en la profesión periodística, viene a poner sobre la mesa la ubicación ideológica de esta dirigente de Podemos en Galicia, y abre la reflexión sobre si su inclusión en la lista de Breogán Riobóo busca pescar en tan selecto electorado. No es «enlodar», es informar, mal que a alguno le pese en su sectarismo.

Estos escandalizados dirigentes de AGE son los que con denuedo y cada cierto tiempo, de manera recurrente, intentan pasarle al PP la prueba del algodón del franquismo, a ver si los de Feijóo andan despistados y evitan la condena pública. Desde 2006, el PPdeG ha reprobado dos veces en resoluciones parlamentarias el anterior régimen político de España.

Estos mismos próceres del rupturismo, que exigen al PP avergonzarse del franquismo —como si Feijóo o sus conselleiros hubieran vestido la camisa azul— son los que se niegan a condenar a quienes ponen bombas en ayuntamientos, los que justifican el uso de la violencia como forma de expresión, los que amparan la coacción a quien se dice del PP, los que cuestionan a medios como ABC que informan con libertad. Peor para ellos.

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