minería

Industria mejora la propuesta para desbloquear la venta de carbón

Herrera agradece la «sensibilidad» de Rajoy y Santamaría y cree que el futuro del sector «se puede garantizar»

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Las negociaciones al más alto nivel parece que empiezan a dar frutos para que el carbón puede ver algo de luz al final del túnel. Después de que hace unas semanas Mariano Rajoy se comprometiera ante el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, y ante la emocionada candidata del PP en Toreno (León) a hacer «todo lo que pueda» por el sector, ayer el Ministerio de Industria trasladó a los sindicatos una nueva y mejorada propuesta para tratar de desbloquear la venta de carbón autóctonos a las térmicas. Este borrador incluye por ejemplo el aumento desde 3,9 a los 5,6 millones de toneladas la producción de carbón nacional cuya compra por parte de las empresas estaría garantizada.

El propio Herrera agradecía ayer en Palencia «la sensibilidad, inteligencia y voluntad» del Gobierno, «especialmente de Mariano Rajoy y de la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría» por haber sido «conscientes» de lo que calificó como «una necesidad» que «puede y debe garantizar el futuro del carbón autóctono».

En cuanto al documento gubernamental, para «animar» a las térmicas a esa adquisición del mineral propio también eleva los incentivos que recibirían las firmas propietarias de las centrales para modernizarse a cambio -en principio- de comprometerse a la compra del carbón autóctono.

Los sindicatos, de momento, ven con buenos ojos las modificaciones, aunque consideran que hay aún muchos aspectos por aclarar, especialmente los vinculados a las fechas de publicación y aplicación de un decreto que ya llega «muy tarde» para un sector al borde de la muerte. Y es que ayer mismo la dirección de la Hullera Vasco Leonesa (HVL) comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y a la representación legal de los trabajadores que hará efectiva la suspensión de contratos de trabajo, por causas productivas, para toda la plantilla durante 6 meses a partir del 11 de mayo. La suspensión afecta a 335 trabajadores, de forma rotativa, fundamentalmente para realizar los trabajos necesarios de mantenimiento y conservación de las instalaciones. En la misma línea, Uminsa -la otra grande- empezará a negociar también este lunes un nuevo expediente de regulación que afectará a sus 390 trabajadores y que podría durar nueve meses.

Mientras, los sindicatos mineros -antes de conocer la nueva propuesta del Ministerio- plantearon ayer la realización de encierros en ayuntamientos y diputaciones, concentraciones ante centrales térmicas y sedes de empresas eléctricas.

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