Ciudadanos «hace limpieza» de militantes críticos con el oficialismo en Canarias

No hay espacio para afiliados incómodos para el aparato del partido. Ese parece ser el mensaje que la dirección nacional de Ciudadanos ha enviado a sus militantes en Canarias, tras haberse resuelto las primarias para elegir candidatos por las dos provincias isleñas el pasado fin de semana y decretarse, el primer día hábil siguiente, la revocación de su condición de afiliado a una de las más significadas figuras locales, casualmente, simpatizante de los candidatos no afectos a la línea oficialista que representa Beatriz Correas en Las Palmas.

Concretamente, es el caso de Christian Cerpa, que ha trabajado estos meses por la candidatura del que este fin de semana resultó ganador en las primarias por la provincia de Las Palmas, Saúl Ramírez, y que el lunes pasado, día siguiente de conocerse los resultados, fue notificado de la revocación de su inscripción como afiliado, sin que llegase a acabar el llamado «periodo de prueba» a que se somete cada aspirante.

La candidatura de Ramírez se impuso a la de David Morales, vinculado al negocio hotelero y apoyado por Beatriz Correas, delegada territorial de Ciudadanos y que, según pudo saber ABC, envió un informe a Barcelona que sirvió de justificación para los de Albert Rivera a la hora de marginar a Cerpa de la vida de partido, apenas 24 horas después de que su sector se declarase ganador al del «aparato».

Un grupo de afiliados, que se interesó por el asunto ante Correas, para pedir explicaciones sobre el caso de Cerpa, no solo no recibió justificación alguna de los hechos, sino que se le abrió en el acto un expediente de expulsión de la formación de Rivera a un miembro de la Junta Directiva de Gran Canaria, Alejandro Artiles, según aseguran fuentes del partido.

«Qué mal perder tienes», le había reprochado Artiles a Correas en el chat donde se comunican los miembros de la Junta Directiva. Ante esta situación, se cuentan por decenas los afiliados que afirman que si no se resuelven estos casos, se darán de baja del partido.

Fuentes cercanas al sector disconforme insistieron pese a todo a ABC que no discuten en absoluto el liderazgo de Rivera, pero sí los modos y las decisiones políticas de sus representantes directos en Gran Canaria.

El hecho que desencadenó el informe de Correas sucedió allá por marzo, cuando a través de Facebook se convocó a una reunión de simpatizantes con el objetivo de sumar más afiliados, un cónclave que la delegada territorial —la única con línea directa con Rivera en Canarias—, a pesar de estar invitada, no veía con buenos ojos.

En ese momento, Cerpa no estaba siquiera en el «periodo de prueba», pero sin embargo se le ha aplicado esta sanción que le deja, virtualmente, fuera de toda posibilidad de seguir militando en la formación surgida en Cataluña.

Al ser consultado por este periódico, Cerpa prefirió no hablar del caso ni dar detalles sobre la sanción que acaba de sufrir, mientras que fuentes cercanas a Beatriz Correas optaron por no decir nada, justificándose en que se trata de una decisión «a nivel nacional».