El socialismo rumano recupera el poder

El Partido Socialdemócrata (PSD) ha recuperado el poder como ganador claro de las elecciones legislativas que se celebraron ayer en Rumanía, poco más de un año después de la dimisión del primer ministro Victor Ponta, a consecuencia del escándalo provocado por el incendio de una discoteca en el que murieron más de 60 personas. El mismo partido que fue expulsado del poder en noviembre de 2015 ante la presión popular logró ayer, según las encuestas, el 45% de los votos, 15 puntos por delante de las fuerzas de centroderecha.

A los socialdemócratas les ha sido rentable una campaña en la que han multiplicado las promesas de grandes aumentos de salarios y de pensiones, en un país que acumula las primeras posiciones en todas las estadísticas de pobreza en la UE, pero que conoce cierto dinamismo en los últimos tiempos.

El hartazgo contra la corrución explica la baja tasa de participación.

Los socialdemócratas no han revelado todavía quién será su candidato a primer ministro, entre otras cosas porque el presidente de la República, Klaus Iohannis, (centroderecha) ha anunciado que no aceptará a ningún miembro del Gobierno que tenga cuentas pendientes con la justicia a causa de la corrupción.

El sistema de doble legitimidad, con un presidente de la República con competencias ejecutivas elegido por sufragio universal y un jefe de Gobierno respaldado por una mayoría parlamentaria, ha sido reiteradamente fuente de conflictos políticos en uno de los países con más problemas de corrupción en Europa. En algunas cumbres europeas ambos se han llegado a disputar el asiento único que corresponde al país.

Los resultados oficiales serán conocidos este lunes, pero los observadores consideran que el recuento no podrá alterar las proyecciones.