Obama suaviza el embargo días antes de su visita a Cuba

Paso a paso, medida a medida, Barack Obama sigue adelante con la política de hechos consumados para debilitar el embargo de Estados Unidos a Cuba, que suma ya medio siglo de historia. Ante el anunciado bloqueo de la mayoría republicana al empeño legal del presidente de poner fin al sistema que prohíbe el comercio con la isla, que sólo puede desmontarse echando abajo la ley en el Congreso, la Administración Obama ha impulsado este martes nuevas medidas de flexibilización.

Los norteamericanos tendrán más facilidades para viajar a Cuba, lo que progresivamente impulsa el negocio turístico de La Habana, al tiempo que el régimen que lidera Raúl Castro podrá acceder al sistema financiero internacional. En la práctica, permitirá el uso del dólar a las instituciones cubanas y que puedan recibir un salario los cubanos que viven en Estados Unidos.

Obama hace así un nuevo guiño, previo a su histórica visita a La Habana, que arranca el domingo y que le convertirá en el primer presidente norteamericano que viaja oficialmente a la isla en noventa años. El secretario de Prensa de la Casa Blanca, Josh Earnest, definió este martes el paquete como «nuevas medidas de incrementar las oportunidades para los norteamericanos y de mejorar las vidas de los cubanos».

Más facilidades a los empresarios

A partir de ahora, los ciudadanos estadounidenses podrán viajar individualmente a Cuba, y ya no sólo en grupo de paquetes especiales, dentro de los intercambios culturales y educativos. Pese a ello, se mantiene la prohibición de aquellos viajes turísticos de particulares que no obedezcan a motivos familiares o de intercambio.

Otras medidas aprobadas este martes otorgarán más facilidades al sector privado para el comercio y la búsqueda de negocio en la isla.