Emmanuel Macron, en un discurso de la campaña presidencial
Emmanuel Macron, en un discurso de la campaña presidencial - AFP

Macron asegura que Le Pen es la «anti-Francia» que aboca al hundimiento del país

El candidato socioliberal a las presidenciales francesas cree que el Frente Nacional conduce a «la guerra y la miseria económica»

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El candidato socioliberal a las presidenciales francesas, Emmanuel Macron, cargó hoy contra su rival en la segunda vuelta del próximo domingo, la ultraderechista Marine Le Pen, a la que calificó de «anti-Francia», y advirtió de que si gana ella, conducirá al «hundimiento» del país.

Macron, en un multitudinario mitin en París –según los organizadores había 12.000 personas–, lanzó diferentes puyas contra su contrincante, líder del Frente Nacional (FN), a la que acusó de «sacar provecho del descontento y vivir de él» y de «incapacidad para responder a las dificultades de los franceses». Explicó que lo que se juega en la segunda vuelta el próximo domingo es «la lucha (...) entre una Francia patriótica, exigente, reformadora, eficaz y justa» con «una Europa que proteja» y «una Francia reaccionaria, nacionalista (...) que solo aporta como solución el repliegue, el odio».

«El Frente Nacional –argumentó– es el partido de la anti-Francia porque lo que defiende (...) es el hundimiento ineludible de lo que ha construido Francia (...) de su grandeza», añadía. Precisó que si se aplicara el programa de su contrincante, por ejemplo, para abandonar la moneda única europea, «no saldremos indemnes».

«El proyecto de Le Pen y del Frente Nacional» conduce «a la guerra económica, a la miseria y, simplemente, a la guerra», agregó. Macron, que fue durante dos años, hasta agosto de 2016, ministro de Economía del actual presidente, el socialista François Fillon, envió algunos gestos hacia «los que dudan y los que no (le) votaron», en especial, para llevar a cabo cambios en la política europea y, en particular, en el acuerdo comercial suscrito con Canadá (el CETA) y en la directiva sobre los trabajadores desplazados.

En términos más generales, contó que quiere cambiar Europa, «pero solo la cambiaremos si somos fuertes, si somos creíbles». «Queremos una Europa fuerte porque tendremos una Francia fuerte», dijo. Sobre la política familiar, afirmó que preservará el matrimonio homosexual, pero que no legalizará los vientr0es de alquiler «en nombre de la dignidad de la persona humana y del cuerpo de la mujer».

Macron hizo varias alusiones a la ministra de Ecología, la socialista Ségolène Royal, que por primera vez acudió a uno de sus mítines y le dijo que mantendría su política en materia medioambiental y de transición energética.

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