Las inundaciones azotan la mayor parte del mundo y eso es lo que están viviendo en Luisiana después de que el huracán Barry llegase pisando fuerte. Sin embargo, todo cambiaba cuando el domingo perdía fuerza y se convertía en tormenta tropical. Lo mismo están viviendo en el sur de Asia donde las calles son auténticos ríos, los postes eléctricos se han derrumbado y muchos son los que tienen que viajar en canoa. Una situación que se repite también en la India con casas repletas de agua.
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