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El UKIP no termina de encontrar un líder que sustituya a Nigel Farage - REUTERS

El favorito a liderar UKIP, hospitalizado tras un altercado en una reunión del partido

El eurodiputado Steven Woolfe, que perdió el conocimiento durante un encuentro de la formación euroescéptica en Estrasburgo, asegura que está «más lúcido y feliz que nunca» sin aclarar lo ocurrido. Diferentes versiones apuntan a la pelea con un compañero

Enviado especial a Estrasburgo Actualizado: Guardar
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El eurodiputado del partido antieuropeo británico UKIP, Steven Woolfe, ha intentado tranquilizar a sus seguidores con un mensaje desde el hospital en el que asegura que se encuentra «más lúcido y feliz que nunca». Nadie lo diría después de haberlo visto tumbado en una de las pasarelas del edificio del Parlamento Europeo de Estrasburgo después de un altercado poco amistoso con uno de sus correligionarios.

En efecto, los diputados del partido que logró empujar a los británicos por el camino de la salida de la Unión Europea protagonizaron este jueves un oscuro suceso en la sede de la Eurocámara cuando una discusión sobre el futuro liderazgo en el partido acabó con un diputado en el hospital con un moratón en la parte izquierda del rostro.

La sucesión de acontecimientos no se conoce exactamente, sobre todo porque las versiones más escandalosas que han sido publicadas en la prensa británica y los intentos por disimular la verdad por parte de los propios representantes populistas no ayudan a aclarar nada. Además, si hubo una relación entre el forcejeo con otro diputado y el hecho de que se desplomase en una zona pública del Parlamento, no fue inmediato. Woolfe salió de la reunión donde supuestamente se produjo el enfrentamiento con sus correligionarios y pudo ir normalmente al hemiciclo para participar en la votación.

El antiguo líder del partido, Nigel Farage, ha intentado justificar los hechos y no ha negado que los hechos se han producido «a resultas de un altercado» en una reunión del grupo parlamentario, pero sin aclarar los detalles.

Woolfe había anunciado su intención de intentar convertirse en líder del partido, un puesto vacante después de la dimisión de Farage y de su sucesora, Diane James, que abandonó su puesto esta misma semana. El problema parece ser que antes de esta segunda dimisión Woolfe había amenazado con dejar el partido. Según la prensa británica, el autor de la agresión sería Mike Hookem, aunque este no lo ha confirmado.

En el hospital

Woolfe fue auxiliado por los servicios de emergencia del Parlamento Europeo y trasladado a un hospital, desde donde ha dicho que «en estos momentos me siento más lúcido, feliz y sonriente que nunca». Aunque asegura que lo único que tiene es «un ligero entumecimiento» en la parte izquierda de la cara y no una conmoción cerebral como se ha publicado, «como precaución, permaneceré ingresado una noche».

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