El empresario Briatore funda un partido para «salvar a Italia»

El llamado Mr. Billionaire dijo que daba «un paso al frente en un momento especialmente crítico para el país»

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El variopinto escenario de la política italiana se enriquece con un nuevo partido de un personaje singular. El ex playboy y ex director del equipo Renault de Fórmula 1 Flavio Briatore , de 69 años, está hoy de actualidad por un doble motivo: la fundación de su propio partido y el conflicto amoroso con su exmujer, la exmodelo y presentadora Elisabetta Gregoraci (39), madre de su hijo Nathan Falco (9).

Briatore, empresario de éxito natural del Piamonte y también conocido como «Mr. Billionaire», anunció hace unas semanas, en plena crisis de gobierno en Italia, el nacimiento de una formación política llamada Movimento del Fare (Movimiento de Hacer), descrito como «una propuesta fuerte y concreta». En su presentación se mostró seguro de contar con muchos profesionales y empresarios que comparten sus ideas, todos unidos en un solo objetivo: «Salvar Italia. Nos pondremos a disposición y a trabajar por amor de nuestro país. Y lo haremos completamente gratis», afirmó.

Sus prioridades

El empresario lanzó un torrente de propuestas, pero fijó, entre otras, estas prioridades: « Drástica reducción del impuesto al trabajo , iniciar grandes obras de construcción, reforma de la Justicia, abolición de la renta de ciudadanía, trabajo a los jóvenes y promoción del turismo como excelencia de Italia». Quien no hace mucho acabó en las páginas de sucesos por delitos fiscales, de los que fue absuelto en una sentencia del Tribunal Supremo en septiembre 2018, dijo que daba «un paso al frente en un momento especialmente crítico para el país».

Aunque conocida es su amistad con Silvio Berlusconi , hoy Briatore se siente más cercano a Matteo Renzi, el exlíder del Partido Democrático y exalcalde de Florencia. Coincide con muchas de las ideas liberales-reformistas del nuevo partido de Renzi, Italia Viva. Renzi y Briatore tienen además un amigo común: Luciano Presta, importante representante de estrellas del espectáculo y personajes televisivos, un hombre clave en la comunicación e imagen del ex primer ministro.

Briatore tendrá que demostrar ahora en política sus dotes de eterno seductor. De momento, sin embargo, quien le quita el sueño es su exmujer, Elisabetta Gregoraci. Después de un matrimonio de diez años, la exmodelo inició una nueva historia de amor con el empresario Francesco Bettuzzi , de 41 años, fundador y director de una marca de cosméticos, Pure Herbal, de la que es imagen la Gregoraci. El verano pasado surgió el rumor de que la relación entre Bettuzzi y la bella Elisabetta -la pareja nunca oficializó su noviazgo, aunque llevaban saliendo un año- había entrado en crisis y que Briatore estaría tratando de volver con la madre de su hijo. Ella lo desmintió de forma tajante: «No volveré con Briatore», dijo.

Un corazón inquieto

Y cuando las aguas parecían calmadas, el semanario «Oggi» acaba de publicar un reportaje en el que se afirma que Elisabetta Gregoraci «tiene el corazón decididamente inquieto, con un lío amoroso detrás de otro, lo que ha enfurecido a Briatore », por el perjuicio que puede ocasionar al pequeño Nathan Falco. Una vez finiquitada su historia con Betuzzi, Gregoraci voló a Dubái con un nuevo y misterioso acompañante. Según «Oggi», Briatore se habría indignado por ese continuo flirteo, hasta el punto de recurrir a su abogada, Annamaria Bernardini De Pace, célebre jurista y experta matrimonialista. El objetivo de Briatore sería verificar la situación y «frenar las exuberancias» amorosas de su exmujer, porque, a su juicio, podría perjudicar de alguna forma al hijo que tienen en común.

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