Defensa asegura que los soldados españoles en Mali están «fuera de peligro» pese al golpe de Estado
El Gobierno de España aconseja al contingente de alrededor de 300 militares «limitar sus movimientos» tras lo ocurrido
Tras el golpe de Estado perpetrado este martes por militares amotinados en Mali que ha obligado al presidente del país, Ibrahim Boubacar Keita, a renunciar, el Ministerio de Defensa ha informado que el contingente español allí desplazado «se encuentra a salvo, según nos confirman desde Bamako», publicó Defensa desde su cuenta de Twitter.
El Gobierno considera que los militares y civiles españoles que se encuentran en Mali «están fuera de peligro» aunque les aconseja «limitar sus movimientos» tras lo ocurrido. En declaraciones a RNE, la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya , ha asegurado que tanto ella, como la ministra de Defensa, Margarita Robles , están al habla con los militares destacados en el país africano, así como con los responsables de ONG españolas que trabajan en la región y han constatado que no corren peligro.
España mantiene en estos momentos alrededor de 300 militares desplegados en la operación de adiestramiento EUTM Malí que pertenecen a la VII Bandera «Valenzuela».
En EUTM Malí participan unos 550 militares de 26 países europeos, siendo Koulikoro y Bamako los principales lugares de acción. Las tropas españolas están desplegadas en su gran mayoría en el campo de entrenamiento de Boubacar Sada Sy, ubicado en la localidad de Koulikoro, al noreste de Bamako. En el norte, otra operación de combate francesa hace frente al yihadismo, siendo clave para la estabilidad del Sahel.
Nuestro país es el que más efectivos aporta con 290 militares, que ahora se han visto reducidos en un centenar por el coronavirus. Los dos últimos años el liderazgo fue germano-austriaco (2018) y portugués (2019). España renunció a asumir el mando el año pasado al encontrarse en funciones el Gobierno de Pedro Sánchez.
¿Qué hacen tropas europeas en Mali?
La misión EUTM Mali comenzó a principios de 2013. Se implantó poco después de que las tropas francesas, tras la petición de auxilio del Gobierno de Mali, consiguiera tras meses de batalla hacer retroceder a un coalición creada por grupos yihadistas e independentistas tuareg con el único objetivo de derrocar al Gobierno. Esta coalición llegó a estar a principios de 2012 a las puertas de Bamako, la capital de este país africano.
La misión europea en Mali tiene dos objetivos fundamentales. Por un lado, formar a los altos mandos del Ejército maliense para que se establezca una cadena de mando y control eficiente. Por el otro, el adiestramiento básico de las unidades militares del Ejército maliense, para que puedan mantener en un futuro por ellos mismos la seguridad y la integridad territorial de un país fuertemente desestructurado.
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