Cubren con enormes mantas los glaciares de los Alpes

La familia Phillip ha encontrado en unas enormes mantas blancas una solución a su problema. Hace 150 años que abrieron un hotel en mitad de los glaciares de los Alpes, un paraje asombroso, pero que ha pagado las consecuencias del calentamiento global. En los últimos 70 años la temperatura ha aumentado en casi 2 grados y los glaciares lo han notado: "Esta área pierde derritiéndose unos seis u ocho metros anualmente", asegura Andreas Bauder, un glaciólogo. La familia entonces tuvo que buscar un remedio para mantener vivo el atractivo turístico en el que se sustenta su negocio. "Si no hubiese ninguna manta esto estaría ahora mismo plano", añade. Estas blancas mantas fueron la salvación. Sin usar helicópteros, y tampoco trabajadores ya han conseguido cubrir dos tercios de la superficie. Pero a pesar de eso el desembolso que han tenido que hacer ha sido descomunal: "Solo el material nos ha costado 60.000 fancos suizos", confiesa Carlen Phillip. Un esfuerzo que ha merecido la pena para que sigamos teniendo estas preciosas vistas.