Las críticas a Trump por su postura sobre Jerusalén no se traducen en medidas concretas

La ciudad santa afronta un nuevo viernes de oración en el que las facciones palestinas mantienen sus llamadas a la protesta

Grupos propalestinos protestan este jueves contra Trump junto al Consulado de EE.UU. en Johanesburgo Afp
Mikel Ayestaran

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Una semana después de la decisión de Donald Trump de reconocer Jerusalén como capital de Israel y anunciar el traslado de su embajada de Tel Aviv, la ciudad santa afronta un nuevo viernes de oración en el que las facciones palestinas mantienen sus llamadas a la protesta. Además de las movilizaciones en las calles, que hasta ahora no han tenido una gran respuesta, los palestinos han contado esta semana con el apoyo de la Organización de Cooperación Islámica , que el miércoles celebró una reunión de urgencia en Estambul en la que sus 57 miembros acordaron pedir al mundo «reconocer Jerusalén Este como capital de Palestina».

Para el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu , «estas declaraciones no impresionan» ya que «la verdad se acabará imponiendo y muchos países reconocerán Jerusalén como capital de Israel y trasladarán sus embajadas». Las palabras de condena desde el mundo árabe u Occidente no se han traducido hasta el momento en ninguna medida concreta.

Gaza es el lugar donde más fuerte es la respuesta a Trump y, tras el lanzamiento de al menos 15 proyectiles en los últimos días por pequeños grupos fuera del control de Hamás, según los medios israelíes, el estado judío decidió cerrar todos los accesos a la Franja .

Cuatro personas han perdido la vida desde la declaración del presidente estadounidense, dos manifestantes abatidos por disparos del ejército en la verja de separación y dos milicianos de Hamás en un bombardeo como represalia al lanzamiento de cohetes. La Franja vivió la celebración del 30 aniversario del nacimiento del grupo islamista y más de 100.000 personas se congregaron en una céntrica plaza para seguir el discurso de su líder, Ismael Haniye, quien mantuvo el llamamiento a la tercera intifada.

Muchas condenas, ninguna medida

La condena internacional a la decisión de Trump no se ha plasmado en medidas concretas. Arabia Saudí , aliado de EE.UU. y de Israel en la lucha para frenar la expansión regional de Irán, insistió en que el arreglo del conflicto «debe ser negociado sobre la base de las resoluciones de la ONU y de la Iniciativa de Paz Árabe que prevé la creación de dos Estados», declaró al diario Le Monde el ministro de Exteriores, Adel al Yubeir . La posición saudí es decisiva en el conflicto y el diario The New York Times desveló que el heredero a la corona, Mohamed Bin Salman (MBS), presionó al presidente palestino, Mahmud Abás , para que este accediera a renunciar a Jerusalén Este.

Pese a las declaraciones grandilocuentes sobre Jerusalén y a que los dos países no tienen relaciones diplomáticas oficiales, la sintonía entre israelíes y saudíes es mejor que nunca , y una muestra de ello fue la invitación a visitar Israel que el ministro de Inteligencia, Yisrael Katz, envió a MBS en una entrevista concedida al diario saudí El Elaph. En opinión de Katz, Riad debería ser el patrocinador de un proceso de paz congelado desde hace años.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación