Se confirma la ausencia de víctimas tras la explosión de una bomba en EE.UU.

El artefacto ha estallado en la mañana de este sábado en las cercanías de Seaside Park, donde se iba a celebrar una carrera con fines solidarios

Nueva York Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Un artefacto explosivo ha estallado este sábado, a primera hora de la mañana, en la localidad de Seaside Park (Estados Unidos) poco antes de que comenzase en la región una carrera con fines solidarios. Por suerte, y según han señalado los medios locales, no ha habido que lamentar ninguna víctima.

El artefacto, introducido en el interior de un contenedor de basura, ha hecho explosión hacia las 09:30 hora local (13:30 GMT). Con todo, la explosión no ha causado heridos ni daños materiales graves, según ha determinado el portavoz de la oficina del fiscal del condado de Ocean, Al Della Fave, quien también ha confirmado que agentes locales, estatales y federales están investigando lo ocurrido.

A su vez, las autoridades están investigando otro paquete sospechoso cerca del lugar de la primera explosión, según el diario local « Star Ledger».

«Afortunadamente no había nadie en la zona en el momento de la explosión», ha explicado en conferencia del prensa el portavoz de la Fiscalía, quien ha hecho un llamamiento a los vecinos para que no se acerquen al lugar.

La explosión ha tenido lugar poco antes de que comenzara una carrera solidaria en la que tenían previsto participar unas 5.000 personas. Esta, había sido organizada por la fundación MARSOC para recaudar fondos para el Cuerpo de Marines de las Fuerzas Armadas.

«En estos momentos ya está todo bajo control, pero ahora estamos revisando bien la zona para garantizar que no hay riesgos para la seguridad», ha comentado, por su parte, el alguacil del condado de Ocean, Mike Mastronardy.

Hasta el lugar se han traslado agentes de la policía local y estatal de Nueva Jersey, así como varios equipos de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) y del Departamento de Seguridad Nacional (DHS). EFE

Ver los comentarios