Aung San Suu Kyi reaparece por primera vez desde el golpe de Estado en Myanmar

Aung San Suu Kyi , líder de Myanmar , ha reaparecido hoy en persona por primera vez desde hace casi cuatro meses, cuando el Gobierno civil que encabezaba fue depuesto por un golpe de Estado militar y ella encarcelada. Suu Kyi ha acudido esta mañana a un juzgado de la capital, Naipyidó, con motivo de la apertura del caso judicial en su contra.

La mandataria enfrenta varios cargos, entre ellos la importación ilegal de 'walkie-talkies', el quebrantamiento de las regulaciones de coronavirus así como la divulgación de secretos de Estado. De ser declarada culpable en este proceso, que ha sido objeto de críticas por parte de Naciones Unidas y varios países extranjeros, podría pasar el resto de su vida entre rejas.

Durante la cita también ha podido reunirse durante media hora con su equipo defensor. Suu Kyi tiene aspecto saludable pero no está al tanto de lo que sucede en el país, pues durante su cautiverio en paradero desconocido no tiene acceso a medios de comunicación, según ha detallado la portavoz de su equipo, Khin Maung Zaw , en declaraciones a la agencia Reuters.

Suu Kyi, galardonada con el premio Nobel de la Paz en 1991 por sus esfuerzos prodemocracia, dirigía Myanmar desde 2015 . En las últimas elecciones, celebradas en noviembre de 2020, se llevó más del 60% de los escaños. Pero el ejército, que disputaba los resultados entre acusaciones de fraude, acabó dando un golpe de Estado el pasado 1 de febrero antes de que se constituyera el nuevo Parlamento.

La líder y los miembros de su gobierno fueron algunas de las 4.000 personas encarceladas. La junta militar amenaza ahora con disolver su partido, la Liga Nacional para la Democracia . «Nuestro partido nació de la gente y seguirá existiendo mientras la gente lo apoye», ha proclamado ella hoy a través de su abogada.

La población civil reaccionó al golpe con protestas multitudinarias en favor de la democracia. Los militares, comandados por el general Min Aung Hlaing , jefe del Estado mayor, desataron en respuesta un régimen de terror, con asesinatos y torturas . En los últimos diez días la represión del ejército se ha cobrado la vida de al menos 25 personas, entre ellas un niño de 10 años a consecuencia de una explosión en la localidad de Tedim. De acuerdo a cifras de la Asociación de Asistencia a Prisioneros Políticos, el cómputo total de víctimas rebasa los 800 muertos.