Trump promete por escrito apoyar al candidato republicano

Donald Trump no se presentará como candidato independiente si no es nominado por el Partido Republicano. El millonario neoyorquino quitó ayer un peso de encima a todos los hombres fuertes de la formación conservadora, que temían que una competencia directa en la elección presidencial dejara sin opciones a su candidato, en beneficio de la opción demócrata.

El magnate despejó este jueves definitivamente la gran duda que había rondado hasta ahora carrera por la nominación republicana al anunciar que había firmado por escrito el compromiso planteado por la dirección del partido.

Aunque dirigentes de esta formación en algunos estados habían apuntado que no se trataba de ningún iniciativa antiTrump, su eventual candidatura independiente se había convertido casi en un soterrado casus belli para algunos aspirantes, incluido el propio Jeb Bush, favorito del establishment.

Se puede decir que Trump eligió su casa para proclamar su compromiso. En una conferencia de prensa en la Trump Tower, símbolo de su poderío económico en su natal Manhattan, argumentó que al firmar el escrito había elegido de esta manera «el mejor camino hacia la victoria, que es el de ir directamente contra el (candidato) demócrata que también salga elegido candidato».

En su habitual tono triunfalista, Donald Trump no mostró resquicio alguno en su convicción de victoria: «Adquirido mi firme compromiso pleno con el Partido Republicano y los principios conservadores, ahora vamos a salir ahí fuera a luchar duro y a ganar».

La decisión mete en cintura republicana al aspirante neoyorquino, que si por algo se ha caracterizado hasta ahora es por sus críticas al comportamiento de los políticos y los partidos clásicos.

Ante la inquietud surgida entre el establishment republicano ante una casi segura derrota de su candidato si Trump se decidía a competir con él si no era nominado, la dirección del partido promovió, primero de manera discreta, después más abiertamente, la una serie de compromisos escritos en estados como Virginia y las dos Carolinas (del Norte y del Sur).

Tras el encuentro en privado con dirigentes del partido, el magnate anunció el miércoles su firma, que aunque según algunos no tiene consecuencias legales y no pasa de ser una declaración de intenciones, ha convencido de momento a la formación republicana.