Elecciones anticipadas en Grecia: ¿Y ahora qué?

El primer ministro griego, Alexis Tsipras, presentará su dimisión y los ciudadanos serán llamados a unas elecciones, previsiblemente el próximo 20 de septiembre. La Constitución griega impone las condiciones en las que debe tramitarse un proceso que devuelve Grecia a la incertidumbre política.

La rebelión interna en Syriza tras la negociación del tercer rescate con los acreedores han empujado al jefe del Gobierno a la convocatoria electoral. Antes, la Carta Magna exige que se cumplan una serie de requisitos.

De acuerdo con la Constitución, al haber sido elegido el Ejecutivo hace menos de un año, ahora el presidente de la República tendrá que dedicar los tres próximos días a consultar con los líderes parlamentarios de las fuerzas mayoritarias de la oposición si ellos reúnen los apoyos para formar gobierno.

Deberá comenzar por el segundo partido más representado en la Cámara, que es el de los conservadores de Nueva Democracia. De no conseguirlo, está obligado a intentarlo con la tercera fuerza, los neonazis de Amanecer Dorado.

Si los contactos con estas formaciones no dan resultado el presidente tendrá que convocar oficialmente nuevas elecciones.

En cualquier caso, la situación política en Grecia hace pensar que estos trámites se completarán rápidamente. Es poco probable que ni Nueva Democracia ni Amanecer Dorado intenten formar una mayoría alternativa a la ahora fragmentada de Syriza.