Críticas al proyecto de Hungría de levantar una valla para frenar inmigrantes

Hungría anunció este miércoles que prevé levantar una valla de cuatro metros de altura en su frontera con Serbia para frenar la llegada de inmigrantes irregulares. La verja, de 175 kilómetros de longitud, será similar a la que España levantó hace dos décadas en las fronteras de Ceuta y Melilla con Marruecos y que con los años se han ido reforzando hasta ser triples y de seis metros de altura. Las críticas no han tardado en llegar tanto de la Comisión Europea como de los serbios o la ONU.

Unas 57.000 personas han llegado de forma irregular a Hungría a lo largo de 2015 frente a los 43.000 que lo hicieron en todo 2014. Alarmado ante estas llegadas, el Gobierno ha previsto una reunión con las autoridades serbias, territorio fuera del tratado de Schengen, el próximo 1 de julio para abordar el proyecto.

La idea de esta nueva barrera ha recibido más críticas que aplausos. La Comisión Europea, recordando que el Telón de Acero ha caído hace no demasiado tiempo, pide se que empleen «medidas alternativas», ha dicho ante los medios con respecto a la polémica la portavoz Natasha Bertaud, informa France Presse.

«El derecho a pedir asilo es un derecho humano inalienable», ha dicho criticando directamente el proyecto Kitty McKinsey, portavoz de la agencia de la ONU para los refugiados ( Acnur). «Nadie levanta muros en un mundo moderno, y más en Europa», ha declarado el primer ministro de Serbia, Aleksandar Vucic, de visita en Oslo, informa Reuters.

El primer ministro de Hungría, el conservador Viktor Orban, se encuentra en el ojo del huracán por oponerse al sistema de acogida de refugiados por cuotas que propone Bruselas y tratar de reforzar las fronteras de la Unión Europea.

La polémica ha saltado a la palestra en la semana precisamente en la que se celebra el Día Mundial del Refugiado este sábado con la idea de concienciar sobre los derechos de las personas a recibir protección internacional. Esta valla de hungría recuerda los tiempos de la Guerra Fría, incluído el Muro de Berlín, que aislaba el este comunista de Europa, que englobaba también a la propia Hungría, del oeste capitalista, entiende la agencia Reuters.

«Insolidaridad y rechazo»

El reforzamiento de las fronteras con medidas como estas vallas y el incumplimiento de los compromisos adquiridos como países firmantes de la Convención de Ginebra de los refugiados son constante objeto de críticas no solo por parte de Acnur, que este jueves ha presentado su informe anual. También lo han hecho ONGs como la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR). El mundo asiste al «mayor éxodo desde la II Guerra Mundial», recuerda Estrella Galán, secretaria general de CEAR, al tiempo que critica la «insolidaridad y rechazo» imperantes en la política de la Unión Europea.

El Drama en el Mediterráneo, la crisis en Ucrania y el gran número de refugiados sirios que huyen de la guerra hacia Turquía centra el movimiento forzoso de población en Europa en los últimos meses, según Acnur, que ha presentado este jueves su informe anual.

Los desplazados forzosos en 2014 en Europa ascendieron a 6,7 millones frente a los 4,4 de 2013. Una cuarta parte son sirios que escapan de la guerra hacia Turquía, lo que ha convertido a este país, con 1,59 millones, en el que más desplazados acoge del mundo. Solo el año pasado 219.000 emigrantes cruzaron las aguas del Mediterráneo y 3.500 murieron. A lo largo de 2015, 102.000 han llegado ya.