Venezuela, el país en el que más retrocedió la libertad de prensa en 2014

«Harían reír si no ejercieran un control absoluto de la información». Así califica Reporteros sin Fronteras (RSF) la cómica actitud de los dictadores -«caricaturas vivientes»- que el año pasado contribuyeron al deterioro generalizado del trabajo de los informadores en el mundo. El informe de 2014, que ayer dio a conocer la organización con sede en París, destaca la situación de descalabro de la libertad de prensa en Venezuela, país que en la lista de RSF desciende en un año 21 puestos por la escalada de abusos contra los medios independientes.

Según Reporteros sin Fronteras, Venezuela protagonizó en 2014 la principal caída en libertad de prensa debido en gran parte a las agresiones sufridas por periodistas que cubrían manifestaciones de protesta contra el régimen del presidente Maduro.

La Guardia Nacional Bolivariana disparó contra informadores a pesar de que estos se identificaron como tales. El informe de RSF también cita las detenciones arbitrarias de responsables de medios de comunicación críticos del chavismo, así como la campaña de amenazas.

En su reciente entrevista con ABC, el director de «El Nacional», Miguel Henrique Otero, describió la situación que ahora intenta cuantificar Reporteros sin Fronteras. Otero, editor del único periódico crítico de tirada nacional que queda en Venezuela, denunció las maniobras del gobierno para obstaculizar la compra de papel a través de la negativa a venderle divisas. El régimen de Maduro ha anunciado además que demandará al diario por reproducir las informaciones de ABC, en las que se relataba en exclusiva la deserción a Estados Unidos del jefe de seguridad del «número dos del régimen», Diosdado Cabello.

La estrategia del gobierno venezolano denunciada por Otero coincide con la que recoge el informe de Reporteros sin Fronteras: las amenazas a informadores, la violencia física y el procedimiento en los tribunales contra las pocas voces críticas que luchan por sobrevivir en el país. Los grandes medios de prensa o audiovisuales que no han sido obligados a cerrar (caso de la cadena RCTV) han sido comprados por el régimen, y se han convertido en portavoces dóciles del chavismo.

El informe de RSF no es complaciente con otros regímenes iberoamericanos. En una clasificación de 180 Estados del mundo, Cuba ocupa el puesto 169 y es con diferencia el país americano más hostil a la libertad de prensa.

Crimen organizado

RSF considera que en el subcontinente existe una excesiva concentración de medios «que no contribuye al pluralismo informativo». En Cuba, todos están en manos del sistema comunista. por lo que en la isla «no existe prensa libre». La restricción de internet y el acoso a los blogueros completan el cuadro.

En 2014, la principal lacra para el continente americano no fue, sin embargo, la ideología marxista, sino la incidencia del crimen organizado en países con un régimen formal de libertad de prensa como México, Honduras, Colombia, Guatemala, Brasil y Paraguay. En estos países, las bandas organizadas del delito -a veces en connivencia c on las autoridades o la policía- han creado un clima hostil que con frecuencia acaba con el asesinato de informadores, o la autocensura en algunos medios. Tal es el caso, de México, que en el informe de Reporteros sin Frontera ocupa un puesto muy bajo: el 148 de los 180 analizados.