Tercios españoles

Tres expertos desvelan a ABC las mentiras de los Tercios españoles, las unidades más letales de la Monarquía Hispánica

Magdalena de Pazzis Pi Corrales, Juan Víctor Carboneras y Enrique Martínez Ruíz analizan en este diario los pormenores de las legiones romanas de la Monarquía Hispánica a pocas jornadas de la celebración del Día de los Tercios y en una semana llena de actos en honor de estas unidades

Vídeo: Los Tercios de Flandes, la infantería española que dominó Europa Augusto Ferrer-Dalmau/ ABC
Manuel P. Villatoro

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La Leyenda Negra no fue solo el lastre de los conquistadores de las Américas. Si bien es cierto los escritos de Bartolomé de las Casas se transformaron en una suerte de mascarón de proa que los enemigos del Imperio utilizaron contra nuestra castiza España, también lo es que los soldados hispanos fueron blanco de las «fake news» de la época. Y de aquellos polvos, que diría el refrán, estos lodos. Como explica a ABC el catedrático en historia Enrique Martínez Ruíz (autor, entre otras tantas obras, de «Los soldados del Rey: los ejércitos de la Monarquía Hispánica» ), «se ha identificado durante años a los soldados de los Tercios españoles con mendigos o lisiados». Ni cerca de la realidad.

El también historiador Juan Víctor Carboneras , autor de «España mi natura» y presidente de la Asociación 31 de enero Tercios , está de acuerdo con su colega. Según afirma en declaraciones a este diario, a lo largo de las décadas se vendió al mundo la instantánea de un soldado hispano bárbaro. Un asesino despiadado cuya imagen encarnó el Duque de Alba .

Y, como no podía ser menos, la Catedrática de Historia Moderna de la Universidad Complutense, Directora de la Cátedra Extraordinaria Complutense de Historia Military y autora de la obra «Tercios del mar» , Magdalena de Pazzis Pi Corrales corrobora también esta visión en una entrevista a ABC: «La mayor mentira es que fueron los más violentos y sanguinarios de todos los ejércitos europeos», desvela.

Hoy, estos tres expertos, historiadores versados en los Tercios españoles, se someten a las preguntas de ABC para desvelar desde los mitos más extendidos sobre dichas unidades, hasta sus batallas más desconocidas...

[PUEDE LEER LAS ENTREVISTAS AL FINAL DEL ARTÍCULO]

Una semana por los Tercios

Para luchar contra la desinformación que todavía existe sobre estos hombres, De Pazzis, Carboneras y Martínez se encuentran inmersos esta misma semana en la celebración de las «Jornadas de los Tercios. Súbditos de un Rey, señores de su tiempo» . Un gran evento organizado por la Asociación 31 de Enero Tercios y por la Cátedra de Historia Militar de la Universidad Complutense de Madrid cuyo objetivo principal es divulgar, todavía más si cabe, el pasado de unas unidades que se convirtieron en el terror de sus enemigos en el campo de batalla durante nada menos que dos siglos. El telón de fondo será la celebración del día de los tercios el 31 de enero . Jornada que busca rememorar la batalla de Gembloux , acaecida ese mismo día, aunque en 1578.

El grueso del contenido de estas jornadas, iniciadas el pasado lunes 25, consistirá en una serie de conferencias que se podrán seguir a partir de las seis de la tarde tanto de forma presencial en el Instituto de Historia y Cultura Militar de Madrid (hasta completar aforo) como por streaming . A lo largo de las diferentes charlas –que contarán con expertos en la materia como la misma De Pazzis, Enrique Martínez, Fernando Martínez Laínez o Augusto Ferrer-Dalmau – el aficionado a la historia podrá zambullirse de lleno en temas como la importancia de los Tercios embarcados, las batallas más destacadas de estas unidades o, entre otras tantas cosas, el valor de la intendencia que les seguía por media Europa.

Con todo, las conferencias no serán las únicas actividades que se han planteado. El 29 de enero , por ejemplo, la asociación presentará en la Librería Tercios Viejos su proyecto para el año 2021 y, tan solo un día después , Alberto Bompprezzi y Oscar Torres Carrasco (maestro de la Escuela de Esgrima Histórica de Madrid y Maestro de Armas de la Asociación Española de Esgrima Antigua respectivamente) impartirán una conferencia ilustrada y llevarán a cabo una pequeña exhibición sobre el sistema de combate de estas unidades en el mismo lugar.

Para el 31 de enero, el día de los tercios, el grupo ha organizado una serie de eventos virtuales con los que buscan sortear la pandemia. En primer lugar, instan a los amantes de estas unidades a publicar todo tipo contenido en las redes sobre su historia con el hashtag #31EneroTercios . Entre ellas, instantáneas vestidos con camisa blanca. Tras el mediodía comenzará una maratón de actividades: un tour histórico sobre estos soldados por Madrid (a las 16:30), un concierto de música de época (a las 18:00) y el visionado del documental «La Guerra de Flandes y el Camino Español» (a las 19:00). Todos ellos podrán seguirse a través de la página web de la asociación.

Magdalena de Pazzis Pi Corrales

¿Cuál es la gran mentira que se ha extendido sobre los Tercios españoles y que todavía seguimos creyendo?

Que fueron los más violentos y sanguinarios de todos los ejércitos europeos y no es cierto. Hay que tener en cuenta que los tercios fueron la unidad de élite del ejército español y que siempre se habla de ejército español, cuando debe decirse ejército hispánico y que los tercios españoles suponían un 10/12% de todos los integrantes pues también había suizos, alemanes, italianos, irlandeses, escoceses y de otras “nacionalidades”

¿Y una batalla olvidada en la que demostraran su gallardía, más allá de los conocidas a nivel popular?

Hay tantas batallas…. Sabemos las más conocidas (Lepanto, La jornada de Inglaterra, la toma de Túnez, el éxito de Malta…) y nos quedan muchas más esperando en los archivos con documentación todavía inédita.

Una de ellas, poco conocida entre los que no son expertos, pero de gran repercusión fue la que ocurrió los días 7 y 8 de diciembre de 1585, durante la guerra de los ochenta años (la rebelión de los Países Bajos en 1568 hasta la independencia de Holanda en 1648, en la Paz de Westfalia) en la que el tercio viejo de Zamora al mando del maestre de Campo, Francisco Arias de Bobadilla, se enfrentó y derrotó en condiciones muy adversas, a una armada de cinco barcos de los rebeldes neerlandeses. Se afirma que la intercesión de la Inmaculada Concepción y por ello la Concepción fue proclamada patrona de los tercios españoles (el cuadro de Augusto Ferrer Dalmau).

¿Qué novedades destacadas implantaron los Tercios?, ¿por qué fueron revolucionarios?

 Su organización, destreza, la táctica sorpresa (la encamisada), la camaradería estrecha, su disciplina y eficacia, símbolo de determinación y resistencia. De estos rasgos hablan sus propios enemigos….

¿Quién fue, para usted, el mejor líder de los Tercios españoles?

Hay tres que sobresalen de forma extraordinaria: Lope de Figueroa, a quien vemos actuando contra los piratas berberiscos, en el asedio a Malta, en Lepanto…. Julián Romero, uno de los artífices del éxito de la Batalla de San quintín en los franceses y en numerosos episodios bélicos en Flandes, no en vano era conocido con el apodo de “el de las hazañas”. Y, por último, pero no por ello menos importante, Sancho Dávila, presente en la batalla de Mook (1574) derrotando a un ejército de invasores bajo los hermanos de Guillermo de Nassau, de la Casa de Orange, alcanzando entonces la fama y la gloria, la defensa del castillo de Amberes, cuya actuación le sirvió el comentario de “era tal vez el único general de su tiempo que había mandado en jefe indistintamente en mar y tierra” y como maestre de campo general de todo un ejército real, acompañando al duque de Alba en la conquista de Portugal (1580). Cuentan que Felipe II le preguntó a Alba cuánta gente necesitaría para la empresa, Alba le contestó que veinte mil hombres, pero que, si le acompañaba Sancho Dávila, tal vez bastara con diez mil.

Juan Víctor Carboneras

¿Cuál es la gran mentira que se ha extendido sobre los Tercios españoles y que todavía seguimos creyendo?

Hay dos clases de mentiras, en relación los tercios, que no hacen justicia a su historia. De un lado, una de carácter negro que relaciona a los tercios con los conceptos de santuinarios o despiadados, desacreditando cualquiera de sus acciones y estableciendo un tópico que vertebra en la creencia popular y en el imaginario colectivo. De otro lado, se ha venido a difundir una leyenda de color rosa, o de carácter aureo, como prefieran, que asemeja a los tercios y sus componentes con seres invencibles.

Una y otra son erróneas, pues los tercios y sus hombres, fueron ejércitos y hombres de su tiempo, que perdían o vencían como nosotros mismos durante nuestra vida. Sin embargo, no cabe olvidar, que los tercios fueron los auténticos baluartes inexpugnables de la Monarquía Hispánica, componiendo el nudo central y sus unidades más destacadas, convirtiéndose en un ejemplo para el resto de potencias europeas.

¿Y una batalla olvidada en la que demostraran su gallardía, más allá de los conocidas a nivel popular?

Sin duda alguna, uno de los ejemplos más olvidados y que nos explica muy bien la dinámica de los tercios, sus dificultades, sus operaciones y su mecanismo fue el sitio de Ostende, que tuvo lugar en la ciudad con el mismo nombre entre julio de 1601 y septiembre de 1604. Durante tres años, el ejército de Flandes, con los tercios españoles en su cabecera, vivieron uno de los asedios más importantes de la historia universal, especialmente por el alto coste de vidas y recursos que conllevó.

El sitio de Ostende caracteriza y enmarca muchos de los rasgos principales de la guerra de este tiempo. En primer lugar porque se trata de un sitio, fenómeno muy natural durante los siglos XVI y XVII, cuando las batallas a campo abierto son muy escasas, casi inexistentes. Además, en él van a participar un conglomerado de nacionalidades y potencias europeas considerable, unas del bando de la corona española y otras aliadas al bando rebelde holandés. Por si esto fuera poco, también tenemos la participación de Ambrosio de Spínola , uno de los hombres más importantes si tenemos en cuenta a los tercios y su desarrollo durante el siglo XVII.

También fue un sitio en el que se pusieron en práctica múltiples innovaciones motivadas por la ingeniería militar, esto nos habla del constante cambio que fueron implementando los tercios. Por último, añadir que grandes artistas ya representaron el sitio en su tiempo, como Sebastian Vrancx o Pieter Snayers. Las muertes, el sufrimiento y la vida de milicia fueron el pan de cada día de los soldados de los tercios que desenvolvieron en el asedio de Ostende

¿Qué novedades destacadas implantaron los Tercios?, ¿por qué fueron revolucionarios?

Los tercios nacieron por un motivo fundamental, su creación se debe a la necesidad de establecer unidades militares permanentes en Italia, para hacer frente a los numerosos conflictos que la Monarquía Hispánica albergaba, especialmente contra los franceses, sin olvidar el hostigamiento en el Mediterráneo por otomanos, piratas o berberiscos. Este paso supuso la gestación de un ejército profesional, que se mantenía al acabar una campaña y se desplazaba en función de las necesidades de la corona. Un paso decisivo pues supuso la creación del primer ejército moderno, pese a lo que viene a remarcar la historiografía anglosajona.

«La leyenda rosa no ayuda a los tercios españoles. Fueron hombres de su tiempo, que vencían y perdían»

¿Quién fue, para usted, el mejor líder de los Tercios españoles?

Siempre me gusta quedarme con todos esos hombres anónimos que, a veces, no encontramos en los archivos o que se hallan en listas interminables de relaciones de batallas o hechos, y que dieron su vida convencidos de que lo hacían por un motivo justo. Desde luego, hombres como Julián Romero, Juan del Águila, Lope de FIgueroa o Cristobal de Mondragón pusieron su pica en los anales de la historia. Sin olvidar a Alejandro Farnesio, cuyas dotes de liderazgo supusieron una auténtica revolución e el desarrollo de la guerra en Flandes.

Enrique Martínez Ruíz

¿Cuál es la gran mentira que se ha extendido sobre los Tercios españoles y que todavía seguimos creyendo?

En los últimos años se ha reivindicado bastante la imagen de los Tercios. Tal vez, lo peor haya sido identificar a los soldados de los tercios con las imágenes de mendigos y lisiados que se difundieron por Europa durante y después de la guerra de los Treinta Años , oscureciendo e ignorando lo que realizaron los tercios en los campos de batalla.

¿Y una batalla olvidada en la que demostraran su gallardía, más allá de los conocidas a nivel popular?

Más que una batalla, yo destacaría la campaña de 1568 en Flandes, con victorias tan rotundas como la de Dahlem, en la que ya destacaron hombres como Sancho Dávila y cuyo resultado fue rechazar la invasión de los Países Bajos que había intentado Guillermo de Orange

¿Qué novedades destacadas implantaron los Tercios?, ¿por qué fueron revolucionarios?

Desde mi punto de vista, la gran novedad fue la acertada conjunción de las armas de asta -las picas- con las portátiles de fuego -arcabuces y mosquetes-. Supuso una gran novedad táctica y orgánica y marca la consolidación de la Infantería como reina y señora del campo de batalla, neutralizando las cargas de la caballería, que tendrá que adaptarse a la nueva realidad militar en un proceso que le llevará décadas.

¿Quién fue, para usted, el mejor líder de los Tercios españoles?

Es muy difícil destacar a uno cuando hubo un elenco de figuras militares realmente espectacular. Yo destacaría la llamada "trinidad flamenca": Sancho Dávila (el rayo de la guerra), Julián Romero y Cristóbal de Mondragón

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación