La relajada vida de Melania Trump; spa, masajes y manicura

La ex primera dama ha abierto su propia oficina en Florida, aunque destina los días a sus rutinas de belleza

Ana Mellado

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Partió de Washington con un atuendo impecable para presentarse en un funeral y desembarcó en Palm Beach con un caftán de Gucci, estampado en naranja, y zapato plano. Sus andares altivos y su rostro de pocos amigos se mantuvieron imperturbables porque para algo es Melania Trump, pero ese cambio de look ya encerraba toda una declaración de intenciones. Adiós a los días grises y encorsetados en la Casa Blanca, tratando de mantener el tipo y saludando de manera robótica en los actos oficiales. Los días transcurren ahora en albornoz y pantuflas. Según informa la CNN tras contactar con varias fuentes, las preocupaciones de la ex primera dama se concentran en mantener la manicura impecable y la nariz libre de puntos negros. «Ella va al spa, almuerza, va al spa (nuevamente) y cena con Donald en el patio», declaró una persona del entorno. Melania suele cenar casi a diario pescado y a la mesa se suman en algunas ocasiones sus padres Viktor y Amalija Knavs, que también residen en Florida.

Otra fuente agregó: «No es inusual que Trump pase varias horas al día allí [en el spa], disfrutando de los beneficios a su disposición, a menudo yendo dos veces en un período de 24 horas , para masajes, cuidado de uñas, tratamientos faciales». Ambas fuentes coinciden en que «la ex primera dama ha dejado atrás mentalmente a Washington, a diferencia de su marido».

A pesar de la imagen relajada que esboza la CNN, ayer Melania anunció en Twitter la apertura de su propia oficina. «La Sra. Melania Trump anuncia la apertura de la Oficina de Melania Trump. Siga esta cuenta para recibir noticias y actualizaciones», podía leerse en el mensaje. Y de hecho, ha contratado a tres personas de la Casa Blanca para ayudarla, aunque aún se desconoce qué proyectos llevarán a cabo.

Celos de Jill

Melania prefiere centrarse en su presente soleado, pero la CNN asegura que siente celos de la atención que está recibiendo su sucesora Jill Biden y lamenta el supuesto trato de favor de los medios hacia ella. Jill protagonizó la semana pasada la portada de “People” junto a su marido y ha concedido una entrevista a la revista “Parents”. El pasado domingo, la primera dama también apareció con su marido en un mensaje televisado que se transmitió justo antes de la Super Bowl, uno de los espacios con mayor audiencia.

Los Trump ya mostraron su descontento con las revistas de moda tras su salida de la Casa Blanca y les afearon que Melania no hubiera protagonizado ninguna portada durante sus cuatro años como primera dama, a diferencia de su antecesora Michelle Obama quién apareció en la portada de «Vogue» hasta en cuatro ocasiones. Las comparaciones son odiosas.

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