La mujer de Santi Millán rompe su silencio: «Yo no soy una víctima»
Harta de las especulaciones y los comentarios sobre su relación, Rosa Olucha ha querido aclarar algunos aspectos sobre su relación
Santi Millán habla, en exclusiva, para ABC: «Se ha cometido un delito»
La difusión, sin su autorización, de un vídeo íntimo de Santi Millán ha generado un auténtico revuelo en las redes sociales. Los ciberdelincuentes comparten y airean el contenido con el objetivo de destruir la imagen del presentador. Poco les importa ser cómplices de un delito que lleva aparejadas penas de privación de libertad.
En declaraciones concedidas a Antonio Albert para ABC, Millán reconocía que la verdadera noticia es que «se ha cometido un delito» y dejaba abierta la puerta a iniciar las acciones legales necesarias para garantizar sus derechos fundamentales. En este baile del despropósito, todas las miradas se posaron en Rosa Olucha , la mujer del protagonista.
Las redes empezaron a señalarla como víctima al considerar que Santi le había sido desleal con otra mujer. Harta de los comentarios, ha querido manifestar apoyo total a su marido: «Yo estoy bien. Deberiais preguntaros cómo está él. Él es el que ha sufrido un ataque a su intimidad, que por cierto es delito. Su intimidad es suya y de nadie más».
En la misma línea, ha querido dar explicaciones sobre la naturaleza de su relación sentimental: « Para los que no lo sepan, existen muchos tipos de familia. En la nuestra, la libertad, el respeto y la tolerancia son los pilares sobre los que hemos construido este proyecto ». Para finalizar su escrito, Rosa ha concluido pidiendo normalizar el sexo y lanzando una crítica a los medios de comunicación: «Me da mucha pereza ver que, a estas alturas, el sexo consentido y privado siga causando escándalos. Sí, señores, la gente folla. Dentro y fuera de la pareja. Los medios convencionales dais asco. Habláis de estos temas como escándalos cuando en realidad tendríais que hablar de delitos o simplemente callar». Y así lo hemos hecho desde ABC, denunciando las prácticas delictivas de quienes se abrazan a la impunidad para destruir.
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